Costos de adquisición, registro y manutención son insostenibles
DORIANA BORREGO
“Un carro nuevo cuesta un ojo de la cara y me quedo corto. Los carros de segunda mano son la mejor opción, pero hay quienes te lo quieren vender al precio de uno nuevo, es una exageración, sobretodo porque algunos han pasado hasta por más de tres dueños y no sabes que cangrejo te puedes encontrar”.
Así lo indicó Fernando Arias, quien desea adquirir un vehículo particular para transportarse cómodamente con su núcleo familiar; sin embargo, al igual que muchos jóvenes, cada vez visualiza más lejos este sueño, por la gran inversión que representa la manutención de esta propiedad.
Incluso los vehículos que ya han sido utilizados por muchos años, suelen tener un costo de venta elevado en comparación a la remuneración anual promedio, por lo que utilizar el transporte público sigue siendo la alternativa predilecta de muchos.
“Cuando tienes carro a veces es peor el remedio que la enfermedad. Ya no gastas en pasaje y eres dueño de tu tiempo, pero de lo que no eres dueño es de la plata que vas a invertir en que todo funcione bien; la gasolina, los papeles de propiedad y el registro, el mecánico y cualquier cosa que pueda necesitar es tu responsabilidad y eso no está mal, el inconveniente es, que los precios son absurdos, no puedo trabajar nada más para mantener un medio de transporte”, agregó Arias.
Las alternativas de venta online, como Marketplace o Instagram se han convertido en unas de las más utilizadas por quienes desean comercializar sus vehículos, sin embargo, ante los inconvenientes relacionados a hacer un trámite con un desconocido, cada vez son más personas las que optan por hacer estas gestiones únicamente con algún allegado.
Al consultar los costos en distintas plataformas de venta, pudo observarse que vehículos como los Corsa dos puertas y los Aveo, oscilan entre los $2.500 y $7.000, precio por el cual pueden adquirirse otros vehículos de mayor tamaño y menor kilometraje, no obstante, estos modelos se han convertido en unos de los más populares en el mercado de segunda mano.
“Tuve que salir de la camioneta que tenía porque no era para nada rentable, sobretodo porque los carros después de cierto kilometraje empiezan a pedir y a pedir, pero uno no tiene con qué, ahorita es común ver a la gente con carritos pequeños o camionetas de tanque pequeño porque son los que rinden más la gasolina”, dijo./at Foto: Víctor Gil
