El experimentado abridor mirandino señala que todavía cuenta con los recursos para seguir lanzandoA sus 38 años de edad, Freddy García todavía puede sacar outs. Ya no es dueño del brazo por el que los Filis de Filadelfia pagaron 10 millones de dólares en 2007, pero todavía cuenta con recursos para sortear a los bateadores cuando sube al montículo.
“Siento que puedo seguir y me levanto todos los días con ganas de venir al parque de beisbol”, aseguró, sin un dejo de duda. “Mientras me sienta bien, con ánimo y fuerza física, no tengo razones para pensar en el retiro. Cuando eso llegue, lo afrontaré. Pero ahora me siento bastante bien”.
El derecho regresó a la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, tras seis años de ausencia, luego que los Navegantes del Magallanes lo cambiaran a los Tigres de Aragua, en el receso de temporada.
Buenos números con Aragua
Con el uniforme de los bengalíes, exhibe balance de 2-1, con 2.33 de efectividad y un WHIP de 1.11, en 27 innings repartidos en siete encuentros, incluidas sus tres aperturas de la semifinal, desde que debutó en Maracay el 12 de diciembre.
“Esta liga sigue siendo fuerte. Si revisas los roster del playoff, encuentras a un buen número de peloteros que han jugado o juegan en las Grandes Ligas. Hay que saber pitchar. No es que llegas y vas a dominar. Hay que fajarse, porque los equipos están todos parejos en cuanto al nivel de los bateadores. Todos son súper fuertes”, advirtió García, al momento de repasar sus números.
Cambió la fuerza por la maña
El mirandino ahora vive de esconder sus envíos, ya no cuenta con la poderosa recta que le llevó a convertirse en figura de los Marineros de Seattle desde finales de la década de 1990 hasta mediados de 2000.
“No puedes salir con la mentalidad de un pitcher que tira 95 millas por hora. Eso es mentira. Si estás entre 87 y 88 debes pensar de otra manera, cambiar la manera de pensar y buscar otro tipo de pitcheo para ser efectivo. Mantener la bola bajita y tratar de hacer mejores envíos”, analizó.
Esa manera de lanzar, a la que comenzó a adaptarse después de ser sometido a una operación para corregir un desgarre en el lábrum del hombro derecho, a finales de 2007, lo mantuvo durante varios años en las mayores.
Durabilidad en las Grandes Ligas
García logró sobrevivir y completó exitosas pasantías con los Medias Blancas de Chicago, Yanquis de Nueva y Bravos de Atlanta, equipo con el que tuvo un gran cierra de campaña en 2013, incluida Serie Divisional contra los Dodgers de Los Ángeles.
“Ahora mismo no tengo trabajo. El año pasado (en los campos de entrenamiento) tuve una mala experiencia con Atlanta. Después de lo que hice al final de la temporada, me salieron con una cosa de esas que no entiendes. Quedé totalmente decepcionado”, confesó García, que fue dejado libre por los Bravos una semana antes del Día Inaugural de 2014.
Una carrera con muchos logros
En sus inicios, terminó segundo en la votación del Novato del Año en 1999, ganó el título de efectividad en 2001 (3.05), fue convocado a dos Juegos de Estrellas (2001 y 2002), mientras que sus 156 triunfos representan la mayor cantidad para un venezolano en la historia de las mayores.
“Viví muchos buenos momentos en las Grandes Ligas. Fui a una Serie Mundial, la meta de cualquier pelotero. Porque ganas dinero, pero no todo el mundo puede estar allí. En mi caso gané y tuve la suerte de liquidar el último partido (en la barrida 4-0 de Chicago contra los Astros de Houston en 2005)”, puntualizó el derecho, que durante el pasado verano boreal emigró al beisbol de Taiwán.
Tiene varias ofertas de Japón
Con el equipo EDA Rhinos, el ex grandeliga participó en 25 encuentros y dejó récord de 11-9, con efectividad de 3.18 en 160 innings de labor. Ahora sopesa la idea de ir a probar suerte a Japón.
“Hay un par de equipos interesados, pero nada concreto. Sino logro un acuerdo, entonces me iré para mi casa a cuidar a mis muchachos y a jugar golf”, sonrió el mirandino.
Mientras, da un paso al frente y trata ayudar a los Tigres. La noche del viernes ayudó a mantener las exiguas esperanzas de Aragua de avanzar a la final con una buena labor de cinco entradas en Maracaibo.
“Creo que he hecho mi trabajo. Dije que si venía a Venezuela era a hacer mi trabajo”, concluyó García y la gerencia de los Tigres puede darse por satisfecha con su desempeño.