El Mercado Municipal de El Paso cuenta con un miembro insigne de cuatro patas que se toma en serio la seguridad, llamado El Negro, peludo que tiene 12 años en el lugar donde ha recibido atención y cariño de los concesionarios y visitantes.

Es mestizo, nació en el expendio de alimentos en el 2012 y ha vivido las gestiones desde Alirio Mendoza, Francisco Garcés, Wisely Álvarez y hasta el ahora, alcalde Farith Fraija, como un regidor perruno, que se ha encargado junto al personal de la seguridad de la vigilancia del establecimiento.

Esta mascota comunitaria hace vida entre la entrada y pasillo principal, donde desde muy temprano comienza su faena de alertar al personal de la llegada de los trabajadores para que abran las rejas.

Reina Rodríguez, comerciante, contó: “La mamá era marroncita y el papá era negrito, ellos se criaron en el pasillo C. Siempre los hemos cuidado, entre varios lo alimentamos. De ahí nacieron cuatro perritos”.

No somos refugios

Cuando los vigilantes van dan su ronda el perro los acompaña se va con los vigilantes. En la noche, el canino alerta a los vigilantes si escucha un ruido.

“Es el amigo y guardián del mercado. Cuando llegamos en la mañana, que soy una que llega temprano, está pendiente, si no me abre la puerta, ladra para que me abran la puerta”.

Puntualizó que el mercado no es un refugio, donde las personas dejan abandonados a los perros y gatos en el basurero, “Entre los compañeros que sentimos amor por los animales los curamos, alimentamos y los damos en adopción, pero no tenemos capacidad para ocuparnos de todos”.