Usuarios preocupados ante el ajuste
La Responsabilidad Civil de Vehículos (RCV) es un seguro de uso obligatorio que tiene como fin cubrir los daños causados a terceros en caso de siniestros.
El pasado mes de septiembre, fue publicado en la Gaceta Oficial Extraordinaria número 6.835 las nuevas disposiciones legales para el sector, entre cambios y regulación de las pólizas.
Resaltando como tema principal, lo concerniente a la importancia de amparar a quienes sufran lesiones a la hora de un accidente vehicular.
Igualmente formalizaron a aquellas empresas que ofrecen el servicio aumentando el monto de la cobertura.
Lo que conllevó a un incremento de más del 1000% para aquellos conductores que procedieron a cumplir con la norma exigida por el Instituto Nacional de Tránsito Terrestre (Intt).
Los montos respecto a los automóviles, que anteriormente pagaban por un plan estándar $ 6 o $ 14 por uno premium, hoy es de € 33 y los taxis € 114.
Una moto cancelaba $ 3 actualmente le corresponde € 15.
Los vehículos de carga les correspondía $ 20, en esta oportunidad el monto se elevó a € 45, mientras que los autobuses con el mismo monto quedaron en € 114.
Conductores preocupados
Los profesionales del volante expresaron a Avance su angustia ante esta terrible realidad que tendrán que asumir de cualquier forma.
Alfonso Velázquez dijo: “Antes pagar la RCV no causaba mayor preocupación, tenía un precio accesible, hoy es inalcanzable. Lo triste, es que, si no puedes cubrirla y circulas sin ese requisito, creo que la multa sobre pasa los $ 280, quién puede con eso”.
Asimismo, un taxista de la ciudad que prefirió resguardar su nombre, explicó que no solo es tener que sacar la póliza, también en la renovación que pega en el bolsillo.
“Con mi carro me defiendo haciendo carreritas. A mí se me vence pronto la RCV y se me ocurrió preguntar el valor de la renovación que es de $ 45, el año pasado pagué $ 6, que sorpresa me he llevado, por qué tan alto, casi 20 puntos de diferencia”, resaltó.
Los afectados entienden que las aseguradoras subieron los montos de cobertura, las cuales no se ajustan a la realidad económica que tiene el venezolano de a pie.