“Los medicamentos están escasos, tengo un familiar que sufre de tiroides y para adquirir los fármacos tenemos que hacer milagros”, así lo expresó Elena Ortega, usuaria.
Manifestó que también hace unos días fue a comprar una inyección para el dolor de columna y tuvo que recorrer varios establecimientos en busca del medicamento, porque aunque no tiene el precio regulado también desapareció.
María Carvajal indicó que “los sueros orales, la leche magnesia, el Glucofaje y algunos antiácidos no los hay. Dejaron de fabricar las medicinas reguladas, porque los laboratorios terminan perdiendo”.
Luis López añadió que está afiliado a Locatel y cuando llegan algunos de los productos le avisan, pero a veces ni le da chance de comprarlos puesto que se agotan rápidamente.
La situación es tan crítica que no hay ni suplementos vitamínicos para las embarazadas. /NC/sa
Foto: Karines Sabino