Alex Ramírez, popularmente conocido en Japón como “Ramichán”, podría convertirse en el primer latinoamericano, y apenas en el tercer extranjero, en ser exaltado al templo de los inmortales de la pelota nipona por su amplia y destacada actuación en ese circuito.
El criollo en caso de alcanzar el 75% necesario en la votación uniría su nombre al ruso Victor Starffin y el hawaiano Wally Kaname Yomamine, reportó el Diario 2001.