Al menos un supuesto miembro del grupo yihadista Estado Islámico (EI) murió y varios resultaron heridos durante una nueva operación de los talibanes contra esta formación terrorista en Afganistán, que se convirtió en la principal amenaza para la estabilidad del Gobierno islamista.
La operación se produjo anoche en Saraye Shamali, en el norte de la ciudad de Kabul, después de que los servicios de inteligencia localizaran un escondite del grupo yihadista, explicó a Efe el viceportavoz del Gobierno talibán, Enamullah Samangani.
“Un presunto miembro del Daesh (acrónimo del EI en árabe) murió y varios fueron arrestados, a su vez que abrió una investigación sobre ellos”, añadió Samangani.