Azulgranas y rojiblancos ganaron para superar a los blancos en el liderato de la Liga de España

El Barcelona y el Atlético de Madrid solventaron con autoridad sus respectivos compromisos ante el Málaga (3-0) y el Rayo Vallecano (2-4), con lo que se mantienen al frente de la Liga con un punto de ventaja sobre el Real Madrid. Fue un día con tres líderes. El Madrid ganó el sábado al Granada (2-0) y se situó primero. El Atleti se instaló luego en cabeza con su triunfo en Vallecas. Y al final del día el Barcelona, en el primer partido como presidente de Josep Maria Bartomeu, se deshizo del Málaga y mantuvo el dominio en la clasificación por mejor diferencia de goles.

El defensa Gerard Piqué, a los 40 minutos, desatascó a la salida de un córner un partido en el que hasta ese momento los porteros, Víctor Valdés y el argentino Willy Caballero, habían destacado. Pedro Rodríguez (55) y el chileno Alexis Sánchez (61) acabaron con el sueño del conjunto del alemán Bernd Schuster de dar un disgusto a un Barcelona, que suma los mismo puntos que el Atlético y uno más que el Madrid.

El Atlético se aprovechó de la endeblez del Rayo para solventar el duelo madrileño en Vallecas. El argentino Diego Pablo Simeone sumó su victoria cincuenta como técnico rojiblanco en un choque que su equipo controló sin excesivos problemas. David Villa, tras una brillante asistencia del hispano brasileño Diego Costa, inauguró muy pronto la cuenta. El equipo de Paco Jémez tuvo el empate con un penalti que detuvo el belga Thibaut Courtois a Jonathan Viera.

El acierto del portero atlético mermó las esperanzas rayistas. Arda Turan amplió la ventaja de su equipo a la media hora y justo después de acortar distancias Viera el jugador turco propinó otro serio mazazo a los locales, penúltimos a cinco puntos de la salvación. El Atlético sentenció definitivamente el encuentro con un autogol de Saúl Ñíguez, porque aunque el Rayo reaccionó al final con un tanto del argentino Joaquín Larrivey no hubo opción para el milagro.