Al menos cinco personas han muerto ya en Turquía, y otras tres siguen desaparecidas, debido a las riadas que afectan a distintas partes del país, especialmente a la zona fronteriza con Bulgaria.
En Kirklareli, en el extremo noroeste de Turquía, se ha localizado un tercer cadáver, tras los dos encontrados ayer, de un grupo de doce personas que quedó atrapado en un hotel y fueron arrastrados por la riada.
Seis personas fueron rescatadas y otras tres siguen desaparecidas.