Las empresas pueden implementar un software en la gestión de su día a día para mejorar el clima laboral e impulsar el desarrollo profesional de los empleados

Los empleados son el activo más importante de una empresa. No en vano son las personas con cuyo trabajo se desarrollan productos, se ofrecen servicios, se atiende al cliente final y, en definitiva, son la cara de la compañía de cara a los compradores. Por ello, cuidar a los empleados es hoy en día un pilar fundamental para lograr la competitividad empresarial evitando una elevada rotación de personal que, además de trasladar una mala imagen al exterior, también supone una importante pérdida de tiempo y recursos económicos en buscar, encontrar y formar a nuevos trabajadores.

Para evitar la elevada rotación de empleados en la empresa es necesario, pues, cuidarles y saber en todo momento cuáles son sus necesidades y conocer cuál es su grado de cumplimiento de las tareas. De este modo, la empresa sabrá en cada momento cuáles son las carencias que tienen los empleados y, así, ayudarles a hacer mejor su trabajo.

Para conseguirlo ya existe software de evaluación del desempeño que ayuda a generar un buen clima laboral e impulsar el potencial de los empleados. Se trata de herramientas tecnológicas de última generación que facilitan información sobre los trabajadores y aportan ideas para beneficiar al equipo a través de las respuestas que los trabajadores dan a encuestas o cuestionarios.

A través de las respuestas y tras analizar la información que ofrece el software en forma de estadísticas y gráficas, los responsables de Recursos Humanos de las compañías pueden obtener información de valor con la que evitar problemas, minimizar la fuga de talento y mejorar la productividad de los empleados a través de un buen ambiente laboral.

Según apuntan desde Inside Sesame, empresa desarrolladora de un software de Recursos Humanos que optimiza los procesos relacionados con la gestión de empleados, esta tecnología permite detectar conflictos rápidamente y adelantarse  a futuros problemas, al tiempo que también posibilidad el descubrimiento de habilidades y capacidades de los empleados que ya tenemos y que no habían sido identificadas.

Asimismo, prosiguen, también posibilita la elaboración de planes de carreras para los trabajadores y generar la formación necesaria para que nuestros empleados puedan complementar sus conocimientos y desarrollarse profesionalmente. Y todo ello logrando una mejora de la comunicación entre los trabajadores y los cargos de la empresa.

Conocer a los empleados

Para tener a un empleado satisfecho e involucrado con la compañía, los responsables de la empresa deben mostrar interés por su desarrollo profesional y laboral. Por ello ya está empezando a implantarse en algunas empresas una Guía experiencia del empleado que tiene el objetivo de recoger “las vivencias que tiene un trabajador desde que contacta por primera vez con la empresa hasta que deja de trabajar en ella”, apuntan desde Sesame.

El también denominado “employee experience” puede tener muchos beneficios como la atracción y rendición de talento, el aumento de la motivación y compromiso de los empleados, algo que irá unido a un incremento de la productividad y mejora de la imagen reputacional de la compañía. Otro de los beneficios que están asociado a un buen ambiente laboral es la reducción del absentismo laboral y la rotación de personal, que tiene, además, un impacto directo en las finanzas de la empresa.

Gracias a la información obtenida mediante un contacto con los empleados a través de encuestas o cuestionarios, por ejemplo, la empresa puede adoptar también medidas como la implantación del trabajo a distancia o la incorporación de algunos beneficios como cheques de guardería o formación bonificada que, suponiendo una pequeña inversión para la compañía, generaría un gran beneficio para el empleado y un mayor compromiso por su parte.

Este tipo de seguimiento forma parte de la denominada gestión del talento dentro de la empresa. Un área que no deja de ganar importancia en la economía del siglo XXI y que ha dado lugar ya a la incorporación en los departamentos de Recursos Humanos de la denominada Guía gestión del talento humano que tiene el objetivo de integrar en las plantillas nuevos profesionales y retener el talento que ya existe, reforzando la fuerza laboral de las empresas.

Entre los beneficios de gestionar bien el talento de los empleados está el de atraer a los mejores empleados y mejorar sus índices de productividad. Además, posibilita que la empresa reduzca la brecha que hay entre lo que necesita desde el punto de vista del personal y lo que ofrece el empleado.

Con software altamente especializado como el de Sesame es posible conseguir toda esta información a través del análisis de datos y estadísticas, mostradas además de una forma muy visual a través de gráficos y organigramas, haciendo muy sencilla la toma de decisiones por parte de los responsables de Recursos Humanos de las compañías.