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Crisis de salud humanitaria en Venezuela requiere de acciones inmediatas

Para 2014 Venezuela era el segundo país de América Latina que menos invirtió en el sector publico sanitario.

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Enfermedades erradicadas han vuelto a ser comunes

JOSÉ CANINO

Venezuela atraviesa una grave crisis de derechos humanos, con violaciones masivas a derechos fundamentales, incluido el de la salud, debido a la falta de medicamentos esenciales, tratamientos médicos, sistemas de diagnóstico y deterioro de la infraestructura hospitalaria. Desde diciembre de 2016 fecha del último boletín epidemiológico oficial que fue publicado meses después, y luego retirado de la página web del Ministerio del Poder Popular para la Salud, el país se encuentra en “silencio epidemiológico”, es decir no existen cifras oficiales transparentadas, en materia de salud pública.

La falta de disponibilidad de datos actualizados hace que sea imposible evaluar el alcance total de los problemas de salud que enfrenta la población. Las organizaciones civiles y los gremios médicos, cifran el desabasto de medicamentos en el país entre un 80 y 90%, un colapso hospitalario de más del 50%, y una disminución del personal médico de también el 50% en los centros de salud públicos, que suponen el 90% de los entes prestadores de servicios9 .

En materia de salud, se desconoce la inversión actual en el sistema público sanitario por parte del Gobierno, sin embargo, no obstante que de 1998 a 2010, Venezuela aumentó a casi el doble el porcentaje del PIB para este fin, pasando de un escaso 1,4% al 2,3%, esta tímida tendencia al aumento se estancó durante varios años, desplomándose nuevamente en 2014, al 1,5 % .

Para ese año 2014, última fecha registrada, Venezuela era el segundo país que menos invirtió en el sector público sanitario en América Latina y el Caribe, solo por detrás de Haití . 

La aparición en los últimos dos años de enfermedades ya erradicadas en Venezuela, ha sido considerada como una señal del deterioro del sistema. Venezuela sirvió como modelo para la erradicación de la malaria en las Américas, con su región norte declarada libre de malaria por la OMS en 1961. Sin embargo, a partir del 2008 comenzó a registrarse un leve aumento, hasta que entre 2015 y 2016, los casos (notificados) aumentaron en más del 76% (de 136 mil a 240 mil), superando de esta forma a Brasil como el mayor contribuyente a la carga de la malaria en las Américas, y registrando los datos más altos en toda la historia epidemiológica del país.

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