02/06/15.- Luego de dos años y medio desde la primera vez que se registró el derrumbe, aún se observa una gran cantidad de tierra y maleza que obstruye la vía principal de la urbanización El Paso, lo cual ha afectado en gran medida a los habitantes de la zona.

Los vecinos señalaron que las autoridades responsables no han hecho nada al respecto al igual que los residentes, quienes a pesar de tener conformado un consejo comunal, no han podido solucionar la situación, señaló Martín Mora, comerciante del sector.

El talud se ha convertido en un botadero para los habitantes de José Gregorio Hernández, quienes lanzan desechos, escombros y electrodomésticos en el sitio, lo cual agrava el problema, pues los lugareños de edificios cercanos se ven afectados por esto.

A pesar de que cada tanto hay jornadas de limpieza en la vía por parte de las cuadrillas enviadas por Corpomiranda, el derrumbe sigue abundante en monte, representando un peligro en horas de la tarde, pues es una zona de poca afluencia y el lugar es ideal para que el hampa ataque a los transeúntes y los despoje de sus pertenencias.

Los residentes relataron que el derrumbe fue causado por las fuertes lluvias y cada vez que se está en temporada de precipitaciones, vuelve a registrarse un movimiento de tierra. A esta situación se suma que los habitantes continúan usando el lugar como vertedero, por ello los vecinos reclaman que se haga algo al respecto. Así lo subrayó Mora, quien aprovechó para exhortar a los residentes del bloque aledaño a que saquen la basura los días de recolección, a fin de no contaminar el sector.

Por otra parte, los habitantes informaron que el alumbrado público es deficiente en la zona, debido a que las luminarias no sirven desde hace tres meses./