Un nutrido grupos de muchachos se volcó a las calles de la parroquia para participó  en el Viacrucis Juvenil Diocesano que partió desde la iglesia del pueblo hasta el sector La Culebra. Es una tradición que cumple 18 años 

Más de 1.000 jóvenes tequeños caminaron desde la iglesia San Pedro hasta el Parque Nacional Macarao, sector La Culebra, como parte del Viacrucis Juvenil Diocesano, tradición que se realiza desde hace más de 18 años. Así lo informó la hermana María José González, quien detalló que en esta oportunidad el lema fue “Una sola familia humana, alimentos para todos”. Explicó que en el marco de la actividad se habló sobre el alimento que tenemos para compartir con Jesús.  “El pan que alimenta la vida y la paz fue el tema que conversamos durante las 15 estaciones”.

“Es importante esta reflexión en una sociedad tan convulsionada como la que tenemos hoy, en la que pierden la vida gran cantidad de ciudadanos y en la que se violan los derechos humanos. Invitamos a todos a participar porque vale la pena”. AO/sa/Foto: Karines Sabino