* Los comerciantes esperan mejorar sus ingresos
Comienza la segunda quincena de diciembre y los comerciantes del mercado municipal de El Paso no ven “luz”, ni siquiera porque faltan pocos días para la Nochebuena, cuando se supone que las familias pueden hacer gastos extras para comprar los ingredientes de las hallacas, ensalada de gallina y pernil.
Aunque los concesionarios han invertido en mercancía, ambientar con motivos navideños y presentar ofertas en los productos sus puestos de trabajos, aun no logran atraer la atención de los visitantes, los cuales están enfocados en buscar los precios que se adapten a su presupuesto.
Marcos Velandría, vendedor, explicó que años anteriores el poder adquisitivo de los venezolanos permitía que las personas compraran todo por kilo.
“Es una constante que los clientes te pidan hasta 200 gramos de carne molida, porque luego no pueden comprar la cebolla o el tomate. Tras un mostrador pueden evidenciar el nivel de la crisis económica”.
Desde el primero de diciembre el mercado habilitó el horario navideño, pero aun así no todos los comerciantes abren todos los días, mientras que otros comienzan sus operaciones después de las nueve de mañana.
Gabriela García, vende víveres y aseguró que las deudas las tienen “ahorcada”, a pesar que los proveedores brindan facilidades para cancelar las facturas.
“El 2023 ha sido muy duro, primero porque la devaluación y la dolarización nos tiene contra la pared, porque casi a diario debemos ajustar los precios para mantener el margen de ganancia y la inversión para reponer el inventario”. Advirtió que los ingresos son escasos y la contabilidad prácticamente está en rojo. “La verdad no soy nada optimista para el 2024”.
