Su gran afán por ayudar a las personas más necesitadas, al amor por el arte y la actuación condujeron a Darío Rendón hacia un camino lleno de éxito y aprendizajes, el cual le permitió conocer y viajar con innumerables artistas venezolanos, sin embargo, la humildad que siempre lo ha caracterizado se mantiene intacta.

Durante un largo periodo se abocó a la realización de distintos eventos, siendo su especialidad el beisbol, basket y futbol show, actividad que tenía como objetivo principal la recreación y la fomentación del deporte en los jóvenes venezolanos, motivo por el cual viajó a distintos lugares del país con diversas productoras nacionales, esto con el fin de llegarle a un público mucho más amplio, luego se adentró en el mundo de la actuación donde decidió compartir sus conocimientos a través de cursos impartidos a jóvenes tequeños que querían insursionar en las artes escénicas.

Impulsar a jóvenes a explorar en el mundo artístico es su misión

En el año 2014 Darío creó su propia fundación la cual lleva por nombre “Tercera Base”, lo que él asegura “es una recopilación de todos los conocimientos adquiridos durante 19 años de labor como productor de eventos”, la intención de esta fundación es realzar la labor social, mediante la realización de talleres de actuación que impulsen a los jóvenes a explorar el mundo artístico, teniendo en cuenta que el dinero recolectado de las inscripciopnes y talleres va destinado a casas hogares.
“Los talleres de actuación van de la mano de artistas nacionales con el objetivo de motivar a los jóvenes de los Altos Mirandinos y comenzaran una carrera bien sea en la parte de animación, locución o dramáticos”.

Señaló que grandes artistas como Gustavo Rodríguez, Carlos Cruz, Roxana Díaz, Napoleón Rivero, Luciano D Alessandro y “Coquito”, son tan solo algunos de los tantos que han apoyado a la fundación, resaltó que “son personas que aparte de poseer un gran talento artístico, tienen un gran corazón, pues están dispuestos a contribuir con el futuro de los jóvenes y ayudarlos a emprender una carrera en el mundo de la actuación”.

Pasión por ayudar a los menos privilegiados

“No hay nada más alentador y satisfactorio que un abrazo de un abuelo o de un niño, ver el agradecimiento que demuestran y la sonrisa que emanan cuando se dan cuenta que los artistas son tangibles, que pueden palparlo, que no es algo producto de la fantasía”.

Indicó que le resulta maravilloso y gratificante que los abuelos y niños de las casas hogares puedan obtener un beneficio a través de los talleres de actuación realizados, ya que el dinero de los talleres y eventos van destinados a esta hermosa labor.

“Lo que me impulsa a realizar obras benéficas es la carencia que tienen las casa hogares bien sea en la parte alimenticia o de ropa. ¿Por qué no ayudar? ¿Por qué dejarlos abandonados?”.

“Un loco soñador”

Nacido en Caracas pero criado en Los Teques, este polifacético hombre considera que “la familia es la base de la sociedad” y asegura que el fallecimiento de sus padres le enseñó a valorar más la vida. “Es como las mujeres, hay que conquistarla todos los días con la mejor sonrisa”.

Resaltó que sueña con una mejor sociedad, donde las personas se interesen mucho más en ayudar al prójimo de manera desinteresada “Si nos organizamos como sociedad sería bastante interesante todo lo que lograríamos. Si cada quien aporta su granito de arena, sería multiplicadora la labor”.

Asimismo, explicó que le gustaría implementar la práctica del ajedrez dentro de la fundación, con el objetivo de que los jóvenes y niños se recreen. “Me encantaría contar con el apoyo de entes gubernamentales o empresas privadas para poder fomentar el ajedrez, especialmente en jóvenes y niños, con el fin de realizar encuentros o campeonatos”./lb

No hay sueños que sean inalcanzables para Darío

GERALDINE PEÑA