Uno de los implicados era empleada de la víctima

Yelitza Gudiño y Johan Gudiño, hermanos, de nacionalidad venezolana, están siendo señalados del homicidio de un empresario ocurrido en el interior de su vivienda, en Barranquilla, al norte de Colombia, en la madrugada de este miércoles 12 de mayo.

Según la policía,  a eso de las 4:00 am, la mujer, que trabajaba como mesonera en un popular estadero (sitio de diversión donde  se escucha y baila salsa), propiedad de José Alfredo Noriega Hernández, conocido como el “Negro Argel”, le dió las llaves de la casa  a su hermano para que ingresara a cometer el robo.

“El sujeto entró sin arma. Mi tío estaba acostado y el hombre le ató los brazos. En la búsqueda de joyas y otros objetos encontró un revólver. Mi tío al resistirse lo golpearon en la cabeza con la misma arma. Su muerte fue instántanea”, contó al diario El Heraldo un sobrino de la víctima.

Un adolescente de 17 años, hijo de Noriega también fue maniatado y encerrado en su cuarto mientras todo pasaba. Cuando el menor notó que había silencio logró zafarse de las cuerdas y corrió a la casa de un vecino para pedir ayuda.

Tras el testimonio de los familiares, funcionarios policiales se trasladaron hasta lugar donde residía Yelitza Gudiño y les informaron que minutos antes se había ido junto a otras tres personas. Todos esos individuos habrían participado en el asesinato.

La venezolana que comenzó a trabajar en el local desde mediados de 2019, se ganó la confianza del empresario de 61años hasta el punto de que éste la contrató para que le hiciera oficios varios en su hogar por eso tenía las llaves del inmueble donde se registró el crimen./RP