Las iglesias reabrieron este domingo sus puertas en Grecia tras más de seis semanas clausuradas por el coronavirus y las misas se celebraron incluso al aire libre para posibilitar a los fieles mantener la distancia de seguridad recomendada.
A pesar de que los feligreses y sacerdotes cumplieron estrictamente las reglas del distanciamiento durante la liturgia, en el momento de la eucaristía todo volvió a ser como siempre y el cura impartió la comunión utilizando la misma cucharita para todos, sin lavarla ni desinfectarla entre medidas.
Destacó Unión Radio que en la Iglesia ortodoxa griega la eucaristía -vino dulce y migas de pan- se recibe en una cucharita de plata bendecida, compartida por las decenas o centenares de personas que acuden a cada misa.