El sitio albergará a 600 privadas de libertad

GLORIMAR FERNÁNDEZ

Este jueves fue inaugurado por la ministra de Sistema Penitenciario, Iris Varela, el Centro de Formación Femenina La Crisálida, el cual se instaló en la antigua sede del Internado Judicial de Los Teques, ubicado en la comunidad de El Retén.

El lugar tiene espacio para albergar a 600 reclusas en condición de procesadas, ya fueron trasladadas desde el Instituto Nacional de Orientación Femenina (Inof) un total de 85. En un área especial permanecen 34 privados de libertad del régimen de confianza provenientes de diferentes penales.

Con la habilitación de estos espacios se busca el descongestionamiento de diferentes retenes policiales además de la puesta en marcha de un proyecto educativo y social que verdaderamente regenere a mujeres que deban cumplir condena para poder incorporarse a la sociedad, convertidas en seres útiles y proactivos.

La agricultura será una de las actividades principales a las que se dediquen quienes permanezcan recluidas. Cabe destacar que en las instalaciones funciona una granja de gallinas ponedoras que es manejada por las propias internas.

Las reclusas contaron que al llegar a su nuevo sitio de detención les explicaron que las crisálidas son un insecto que se encuentra en la fase de desarrollo posterior a la forma de larva y anterior a la forma adulta, que luego de un diverso proceso llega a convertirse en mariposa, abejas, entre otros.

“En aras de reinsertarse a la sociedad con firmes valores de confianza, lealtad y trabajo las mujeres y hombres que hoy se encuentran bajo el nuevo régimen penitenciario ven este nuevo centro como una oportunidad de transformación social y espiritual hacia la mujer y el hombre nuevo que la patria necesita, tal y como su nombre lo indica, La Crisálida es un lugar para el surgimiento de la nueva mujer”, expresó Varela en compañía de la alcaldesa del municipio Guaicaipuro, Wisely Álvarez, quien fue designada por la ministra como madrina del servicio penitenciario en Los Teques.

La Crisálida será dirigida por Carelis Marín de la mano de un grupo de profesionales del más alto nivel que garantizarán el mantenimiento de las condiciones de formación cultural y laboral, así como también, las actividades recreativas que conforman el nuevo régimen penitenciario.