Gema, una jirafa bebé de dos metros de altura y 100 kilos de peso, fue presentada el viernes en sociedad en el zoológico chileno Buin Zoo, mientras su madre de poco más de cinco metros de alto no dejaba de mirarla y de caminar en torno a su cría.

El director del lugar, Ignacio Idalsoaga, dijo que Gema nació hace 35 días midiendo 1.60 metros de alto y pesando unos 70 kilos, después de una gestación de 15 meses.

Sobre su rápido crecimiento, explicó que en la naturaleza las jirafas tienen que desarrollarse muy rápido, “porque sus grandes depredadores están siempre expectantes a ellas y la naturaleza les entrega una posibilidad de crecimiento expansivo increíble”.

Calificó el nacimiento de Gema como una muy buena noticia en momentos “en que todas las noticias nos hablan de destrucción del medioambiente, desaparición de especies. Estamos hablando de una especie que en la naturaleza se está transformando en vulnerable”. Precisó que en el continente africano hay unas 70.000 jirafas y otras 3.000 en cautiverio, “lo que habla de la importancia del nacimiento” de un nuevo ejemplar de jirafa. Añadió que “los zoológicos somos verdaderas arcas de Noé”, en alusión a la preservación de especies.

Entre los factores que llevan a la muerte a las jirafas están la caza furtiva para aprovechar sus pieles y huesos y el hecho de que viven en zonas de guerra, dijo el director del zoológico local.