Periodismo de Soluciones

La gaita mueve las fibras de Miguel “Niño” Correa

dsc_0112

Publicidad

Por:
Por:

Periodistas de Avance

Comparte esta noticia

Promueve este sabroso género musical desde su infancia

Se acerca la temporada decembrina y con ella las parrandas características de esta época. Cualquier cantidad de hombres, mujeres y niños se identifican particularmente con la reina del folclore: la gaita.

Uno de ellos, por cierto muy emblemático en Los Teques, es Miguel “Niño” Correa, un talentoso gaitero que alberga en su haber 45 años de trayectoria dentro de este género.

Relató que su apodo como “Niño” viene desde la infancia, creció siendo reconocido entre amigos y familiares de esa manera. Desde muy pequeño trae arraigada la pasión por la música. “En mi familia existe una gran cantidad de músicos, crecí rodeado de toda esa magia que me fue envolviendo poco a poco y se hizo parte de mí para siempre”.

Comenzó a tocar gaitas, parrandas y aguinaldos con tan solo 8 años de edad. “Yo estudiaba en el colegio Los Laureles, allí varios estudiantes congeniamos con esta actividad y decidimos realizar nuestros ensayos en el auditorio del colegio República del Paraguay, poco a poco nos fuimos involucrando con los grupos más grandes”.

El “Niño” Correa rememoró con entusiasmo que para ese entonces había comprado una charrasquita de bronce, con la que disfrutaba los toques y presentaciones. Más adelante, incursionó con la tambora, hasta que descubrió su verdadera pasión: el furro. “No hay nada como ver disfrutar a la gente con lo que uno hace, uno se regocija con eso”.

Aseguró que hoy por hoy es de los que prefiere la gaita del furro, con miras a que este instrumento no se extinga. “Existen muchas agrupaciones que se han orquestado demasiado y están eliminando este tipo de instrumentos. Mi compromiso es seguir fortaleciendo su uso, el furro es el bajo en la ejecución de la gaita”.

 Explorando cada nivel

Entre los más famosos artistas que se formaron en esa generación aquí en Los Teques, Correa recordó a Rafael “Pollo” Brito y Pedro “Murmullo” Urea. “Ellos se criaron con nosotros, luego se dedicaron de lleno al mundo artístico y hoy están consagrados a nivel nacional”.

Profesionalmente, “Niño” Correa inició su carrera de la mano de Trova Gaitera, por el año 83, cuando salió del cuartel, donde por cierto no se desligó del quehacer musical.

“Presté servicio militar en Charallave por dos años, y allá también hice gaita junto a un capitán maracucho, el grupo que conformamos causó sensación en el escuadrón de artillería”.

Más adelante perteneció a los Soneros de la Gaita, en Carrizal; luego, con la Agrupación Cacique, y desde hace 10 años pertenece a La Leyenda junto a Freddy Solano.

Por un milagro de La Chinita

Junto a Humberto “Popy” Zapata, conformó la Fundación Día del Gaitero, un 1º de septiembre de 1983, producto de una promesa ofrecida a la Virgen de La Chinita.

“Mi compadre, presidente de la fundación, pasó por un duro momento en el que se vio comprometida la salud de su hijo. Preocupado, acudió a la Virgen prometiéndole que si intercedía para que el niño se recuperara, él se dedicaría de por vida a venerarla con lo que mejor sabía hacer: gaita”.

El milagro se concedió, gracias a eso el niño es hoy un deportista sano y fuerte. Como retribución por el favor concedido, Zapata creó la fundación que tiene como principal propósito el rescate de esta valiosa manifestación del folclore en Los Teques, así como apoyar a los nuevos talentos.

En torno a ellos, cada año se conglomera un nutrido grupo de músicos, compositores y cantantes del género, que lo difunden con entusiasmo durante todo el año, pero principalmente en la temporada gaitera que arranca con la famosa “Bajada del Furro”, que se realiza en esta ciudad desde hace un decenio.

“Aún cuando la fundación sin fines de lucro fue consolidándose cada vez más, no fue sino después de unos 10 años que realizamos su registro formal. Gracias a eso y a todo el trabajo que se ha venido haciendo, fue nombrada Patrimonio Cultural del Municipio Guaicaipuro en 2013”.

Tradición que se niega a morir

Explicó que durante el año realizan eventos en todo tipo de instituciones, públicas o privadas, ya que a su juicio la cultura no conoce de distingos. Entre las fechas más emblemáticas, que generan mayor movimiento en la fundación, están La Bajada del Furro, Día de La Chinita, Día del Gaitero y cada 31 de diciembre, cuando se concentran en una parrandón que forman en la esquina El Dato.

Al consultarle sobre los orígenes de la tradición conocida como Bajada del Furro, nos comentó que todo comenzó por la iniciativa de un grupo de gaiteros radicados en la comunidad de La Estrella. “Como todos pertenecemos a esta zona, quisimos instaurar esta manifestación allí a la altura del Aldebarán, donde antes quedaba una planada en la que solíamos ensayar”.

Cada año se presentan alrededor de 10 agrupaciones, siempre que la lluvia se los permita. “Acostumbramos a hacerlo siempre en domingo porque se trata de un compartir familiar muy ameno. Iniciamos con una pequeña caminata en la subida de La Estrella, donde al son del cuatro, charrasca, tambor y furro entonamos cantos en honor a la Virgen”.

Prosiguió su relato refiriendo que, “al llegar hasta el punto de encuentro donde está dispuesta una tarima a la altura del dispensario, engalanada por una réplica de la imagen de La Chinita, realizamos una pequeña misa para luego arrancar con la interpretación de las agrupaciones gaiteras que deleitan a toda la comunidad”.

A esta fiesta popular acude gente de todas partes del país, se ha hecho una celebración tan famosa que ya es parte de nuestras tradiciones, tomando en cuenta que Los Teques es la segunda ciudad gaitera de Venezuela, después de Maracaibo.

“Los medios de comunicación que siempre nos apoyan están muy pendientes de esta actividad, este año posiblemente se realice el 25 de septiembre”./Maribel Sánchez/ac/Foto: William Sánchez/

Noticias relacionadas