Aseguran que la medida hundió aún más la economía

ILDER MAESTRE

Hace un año exactamente que el decreto N° 3.548, publicado en la Gaceta Oficial Ordinaria N° 41.446, entró en vigencia la reconversión monetaria, con esta medida la moneda nacional tendría cinco ceros menos y comenzarían a circular dos nuevas monedas y ocho billetes.

También entró en circulación el nuevo cono, que está conformado por ocho billetes, los cuales son: Bs. 2, 5, 10, 50, 100, 200, 500, y dos monedas de 50 céntimos y un (1) Bs.

Para ese entonces, la medida generó expectativas positivas, pues muchos vieron con buenos ojos la nueva emisión de papel moneda, también se observó un cambio económico a la hora de realizar las compras en mercados, ya que los precios no demostraban tanta inaccesibilidad y hubo una sensación expedita de que el dinero en realidad alcanzaba para todo.

Hoy día comerciantes y ciudadanos común y corriente cambiaron por completo de opinión, ante el espiral inflacionario, escasez y altos costos en productos, bienes y servicios.

 Muchos aseguran que el bolívar se devaluó por completo en un país completamente dolarizado, son muchos que están convencidos de que “la economía fue de mal en peor”.

Fabio Goncálves dueño de una carnicería en la avenida Bermúdez enfatizó “prácticamente vivimos en un país dolarizado, ya que la moneda americana es fuerte, el bolívar ya no vale nada, he visto como en otros estados la gente bota los billetes en las calles, la inflación es grande comparada a países como Zimbabue, estamos en una mala economía y el Gobierno contribuye a esto ya que no toma medidas coherentes para salir de este desastre”.

Carolina Mejías costurera, indicó que ir a comprar y no poder hacer un buen mercado da ganas de llorar. “Hace un año había la sensación de que el dinero alcanzaba para adquirir cualquier rubro, pero no es así, todo cambio con el tiempo y vamos de mal en peor, las medidas económicas no sirvieron, de nada sirve imprimir billetes si no tienen un sustento, es solo un papel sin valor. La inflación aumenta los precios todos los días, los comerciantes se vuelven especuladores y los aumentos de sueldo solo son un pañito de agua tibia ante el alto costo de la vida”.

Otros consultados coincidieron en que “ todo fue un engaño para hacer creer que íbamos a tener mayor dinero en nuestros bolsillos, pero al final resultó un fiasco, donde resultamos afectados todos los ciudadanos. Todo fue un espejismo”./rp. Fotógrafo: Ángel Pérez