Conductores temen permanecer en las colas por las condiciones de la vía

DORIANA BORREGO

Las constantes lluvias han provocado múltiples consecuencias que influyen de forma directa en el abastecimiento regular del diésel en las distintas bombas de los Altos Mirandinos, siendo los conductores que esperan para acceder al subsidio los más afectados.

“Cuando está lloviendo los camiones que transportan la gasolina de PDVSA no pueden llenar las reservas de la estación, por eso hay que posponer la llegada del combustible hasta que escampe y termine de escurrir el agua, caso contrario se ve comprometida la calidad de la gasolina aún más, cuando se liga con lluvia disminuye su rendimiento”, comentó Jefferson Romero, conductor.

Añadió que las últimas semanas quienes buscan acceder a los litros subsidiados han lidiado con las condiciones de la vialidad al encontrarse húmedo el pavimento, que hace que las probabilidades de accidentes automovilísticos en la región.

“Con la neblina a veces es complicado ver los carros que vienen y así mismo ellos no nos ven a los que estamos en la cola, ya han ocurrido algunos percances pero hasta ahora ninguno más allá de un susto con un rayón al parachoque. Por eso mucha gente está evitando venir a la bomba de la Oveja Negra, entre el temporal y la bruma estamos contra la pared”, explicó Romero.

Conductores han expuesto que el tiempo de espera para abastecerse del gasoil ha incrementado en al menos una hora desde que inició la temporada de lluvias, siendo el principal factor de riesgo las constantes precipitaciones.

“Incluso el Biopago funciona con inestabilidad, cuando el clima está así las conexiones empeoran y eso alarga aún más el lapso de tiempo que debemos invertir para tener gasolina, esto cada vez cansa más en lugar de echar para adelante, se vuelve peor”, advirtió Alondra Zapata, dueña de un vehículo particular. Foto: Luis Maizo