02/06/15.- No existe mirandino que no presuma de la tradición de los Diablos Danzantes de Yare, que desde hace 266 años emula esa lucha que se vive hoy en muchos rincones del mundo: la del bien contra el mal.
En la población de San Francisco, capital del municipio Simón Bolívar, en los Valles del Tuy, 2.500 hombres con vestimenta roja y máscaras de diablos danzan frente al Santísimo Sacramento, para asegurarse que sea el bien el que siempre resulte victorioso.
La magia que envuelve a esta práctica centenaria, la concentración de fe y dedicación que se transmite por generaciones, hizo que los ojos del mundo giraran hacia esta localidad mirandina en el 2012, cuando la Unesco nombró a los Diablos Danzantes de Yare como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, distintivo que enalteció la devoción de los venezolanos por el catolicismo.
Uno de los relatos que cobra más fuerza acerca del inicio de esta tradición se remonta a 400 años atrás, cuando un sacerdote se quejó por no tener suficientes devotos que participaran en la tradición del Corpus Christi.
Según la leyenda, el religioso vociferó desde el templo: “Si no hay creyentes para sacar al Santísimo, que vengan los diablos entonces”, y fue así como el cielo comenzó a centellar, desatando una fuerte tormenta, que culminó con la aparición de un grupo de demonios que entró al templo a oficiar la misa.
Estos mismos espíritus quedaron luego tendidos ante el Sacramento, lo que representa el triunfo del bien sobre el mal. Asimismo, la tradición se reforzó en 1740, cuando se registró una sequía en este pedazo de tierra, lo que preocupó a los esclavos, quienes eran los encargados de producir las mejores cosechas de la colonia española, para ese entonces.
Desesperados, los negros pidieron a sus dioses y a las deidades de los indígenas, pero nada resultó. Hasta que su angustia los llevó a invocar al dios de los españoles, quien según cuenta la historia, concedió la petición e hizo que lloviera torrencialmente por todo ese año, lo que fue agradecido por los esclavos con la danza.
Tradición que perdura
Según detalló Ernesto Herrera, presidente de la Cofradía de los Diablos Danzantes de Yare, el reto de los promeseros es “hacer que esta tradición dure otros 100 años más; en 2015 se estarán juramentando otros 20, se dice fácil, pero nos ha costado construir esta manifestación”.
Se estima que 20.000 creyentes visiten San Francisco de Yare durante esta semana y que para el miércoles, día en que los diablos se congregan en los alrededores del templo San Francisco de Paula, para solicitar permiso y la bendición del párroco y así poder danzar por todo el municipio Simón Bolívar; asistan turistas nacionales e internacionales a esta gran celebración.
El alcalde Saúl Yánez agregó que se desplegaron 750 funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana, Polimiranda y cuerpos preventivos de los Valles del Tuy, para brindar tranquilidad a los asistentes de esta fiesta. También puntualizó que se suspenderá el expendio de alcohol el 3 de junio, hasta las 2:00 pm, para tranquilidad de los devotos.
“Hay varios tipos de turistas, el docente, el investigador que se viene el miércoles, luego llega el de otros países, que se incorpora al mediodía o a partir de las 3:00 pm, lo que superará los 20.000 visitantes”, declaró el mandatario local.
Por otro lado, el presidente de la Cofradía anunció ayer en una rueda de prensa que por primera vez en 266 años, los Diablos Danzantes saldrán del país. Se estima que este año viajen a Cuba para venerar al Santísimo Sacramento durante el XXXV Festival del Caribe y 500º aniversario de Santiago de Cuba.
Honor al mérito
El Consejo Legislativo de Miranda otorgará la Orden Generalísimo Sebastián Francisco de Miranda a César Tovar, quien ocupa el puesto de primer cajero de la Cofradía y lleva 62 años participando en estas festividades.
Tal y como cuentan pobladores, buena parte de los asistentes danza junto a los diablos como pago de promesa, por favores concedidos por parte del Santísimo Sacramento.
Por: Glorimar Fernández
