Fue el más rápido de la última jornada de pruebas

Un sorprendente Williams equipado con su nuevo motor Mercedes y un renacido Felipe Massa, dominaron la última jornada de test en el circuito de Jerez, España. El brasileño emergió por la tarde para imponerse con claridad a Fernando Alonso y Dani Juncadella (Force India), que mantuvieron un bonito duelo en la primera sesión.

Al filo de las 12.45, Fernando Alonso, en su primera tanda realmente seria (unas 12 vueltas), se situó primero en la tabla de tiempos. Luego se iniciaría una lucha a tres entre el Ferrari, el Force India y el Williams, que se alternaron casi toda la tarde en cabeza. Una bandera roja no dejó mejorar a Felipe su propio crono, cuando faltaban cinco minutos para el final.

Alonso y Ferrari dieron el primer aviso de que también van progresando en el conocimiento de su motor 1.6 Turbo, como respuesta a la solidez de los Mercedes. El propulsor de la casa alemana rinde a satisfacción en tres monoplazas diferentes y es con mucho el que más kilómetros está acumulando en estas cuatro jornadas.

Por otro lado, continuaron los problemas en Red Bull, con un Ricciardo que sólo pudo completar siete vueltas. Ya eran visibles varias perforaciones en los pontones, a la altura del suelo para intentar que no se les quemen los componentes eléctricos, como les ha sucedido el miércoles y el jueves. Pese a ello, su actividad fue muy limitada. Son 21 vueltas en cuatro jornadas, un balance paupérrimo y preocupante. La escudería Lotus, en la que correrá este año el venezolano Padtor Maldonado, todavía sigue trabajando en el monoplaza y esperará a las pruebas de Barhein para ponerlo en la pista.

Ecclestone: Esta Fórmula 1 es una farsa

El británico Ernie Ecclestone considera “una farsa total” la nueva Fórmula 1 con motores turbo, a la vista del resultado de los primeros ensayos. “Ya dije que pasaría. Una farsa total”, dijo el jefe de los derechos comerciales de la competición. “Si quieren competir así, deberían ir a Le Mans”.

Los bólidos de Fórmula 1 están propulsados esta temporada por motores turbo de 1,6 litros, mientras que los de 2013 eran aún de 2,4. Además, pasaron de ocho a seis cilindros, lo que hace los motores más silenciosos debido a su menor potencia. En los primeros tests, casi todos los equipos han tenido problemas de ajuste y han podido dar pocos giros.

Para Ecclestone, la cuestión de los propulsores es absurda. “La gente quiere ruido. Algo especial. De eso va la Fórmula 1. Y ahora tenemos motores silenciosos y nadie en el circuito”, lamentó. Para ahorrar combustible no habría hecho falta cambiar los motores, en opinión del británico de 83 años, que propuso que los equipos tengan motorhomes más pequeños. “Así no necesitarían tantos camiones para ir de un lado a otro en Europa”, dijo.