09/04/15.- El París Saint Germain se clasificó para la final de la Copa de Francia tras vencer 4-1 al Saint Etienne en un partido en el que Zlatan Ibrahimovic se exhibió con tres de los cuatro tantos del conjunto que dirige Laurent Blanc.
El delantero sueco sacó adelante una eliminatoria que su equipo afrontó sin los lesionados David Luiz, Thiago Motta y Edinson Cavani. Además, el PSG se vio las caras ante uno de los equipos que planean por la zona noble de la Liga francesa. No iba a ser fácil.
Estaba en juego el pase a una final que alcanzó este martes el Auxerre tras eliminar al Guingamp y, sin alguna de sus pieza clave, el cuadro de Blanc tenía que remar contracorriente.
Por contra, el Saint Etienne recuperó al sancionado Max-Alain Gradel y a los lesionados Romain Haouma y Jeremy Clement. Con casi todas sus piezas, el técnico Christophe Galtier abandonó la táctica de tres defensas con la que juega en ocasiones para saltar al césped con un 4-3-3 más conservador.
Como se esperaba, el PSG agarró los mandos del partido mientras el Saint Ettiene esperaba en su campo la ocasión de coger desprevenido a su rival con algún contragolpe. Ese conservadurismo se acabó en el minuto veinte, cuando Clerc cometió un penalti sobre el argentino Ezequiel Lavezzi.
El sueco Zlatan Ibrahimovic no falló desde los once metros y marcó su gol número cien con el PSG. No solo hizo el 1-0, alcanzó una cifra redonda para quedarse a solo nueve tantos (luego serían siete) del portugués Pedro Miguel Pauleta, que ostenta el récord del club con 109 dianas.
Tras el gol local, el Saint Ettienne estiró sus líneas. No podía especular más. A un solo partido, sin ida y vuelta, no había tiempo para jugar con fuego. Y, tras tomar esa decisión, su apuesta le salió bien. Además, solo tardó cinco minutos en volver al empate.
Fue el futbolista francés de origen argelino Romain Hamouna quien se encargó de establecer las tablas en el marcador con un cabezazo tras el saque de una falta. La defensa del PSG pecó de confianza y recibió un mazazo.
Sin embargo, tras otra ocasión seguida de Hamouna, el París Saint Germain volvió a retomar el mando e impuso la lógica que dictaba su mejor juego con ocasiones claras.
Lavezzi, ya en la segunda parte, aprovechó un magnífico pase de Javier Pastore desde la banda derecha para hacer el segundo. El tercero y el cuarto, ambos de Ibrahimovic, cerraron el pase del PSG a su decimotercera final. Desde 2010 no se proclama campeón. Cinco años después, tendrá una oportunidad para lograrlo.