Atribuyen daños en buses a deterioro de vías. Choferes se quejan de los elevados costos de reparaciones

 Conductores de la línea de Palo Alto, que presta el servicio a un promedio de 3.500 usuarios diarios, atribuyen los continuos daños de los vehículos al deterioro de la vialidad.

Alberto González, presidente de la organización, afirmó que en la carretera principal desde Santa Eulalia hasta Palo Alto se pueden contar fácilmente unos 60 huecos, la mayoría los abre Hidrocapital para reparar tuberías y nunca los tapa.

Dijo que la situación está peor desde la cancha hasta la Escuela de Perros. “Ese trayecto es malo, es casi intransitable”.

Las unidades sufren averías más que todo en el tren delantero y ballestas traseras. “La reparación puede llegar a costar medio millón de bolívares”.

Se quejó de las dificultades que deben enfrentar para arreglar los carros, unas veces porque no se consiguen los repuestos y otras porque son demasiado costosos.

“Mientras se para un vehículo por algo grave y permanece hasta tres meses en un taller, otro se queda varado por una cuestión más leve como el freno, y poco a poco merma el servicio”.

Actualmente tienen operativos 10 jeeps de 12 puestos y 8 microbuses de 20 asientos. 20 unidades se encuentran paralizadas.

“Ciertamente tenemos cauchos, baterías e insumos, pero no conseguimos pastillas, ballestas, amortiguadores, pasadores, entre otros”.

Al ser interrogado sobre el cobro ilegal del pasaje, denuncia recurrente a través de las redes sociales del diario Avance, explicó que aplican una tarifa de Bs. 55 de lunes a viernes para Las Brisas y Retamal por ser zonas más apartadas. “Son rutas troncales con una topografía especial, es decir que la vía es muy accidentada”.RP/ac/Foto: Gabriel Ordoñez