23/11/15.- Desde hace dos semanas, los huevos han ido desapareciendo esporádicamente, luego de que el Comando para los Precios Justos, liderado por el vicepresidente de la República, Jorge Arreaza, anunció la regulación del cartón a Bs. 420.
Esta situación parece haberse extendido hasta los mercaditos a cielo abierto, en los cuales el cartón y el medio se podían conseguir a precios todavía accesibles, si se comparaban con los montos de comercios establecidos.
Productores aseguraron que los costos de alimento y manutención de las gallinas ponedoras les generan fuertes pérdidas, al ser contrastados con el nuevo valor impuesto por el Gobierno, por lo que más de uno ha decidido destinar su producción para el consumo de familiares y allegados.
Según la Asociación de Avicultores de Táchira, producir un cartón de huevos está por encima de los Bs. 830, esto incluyendo manutención, alimento, transporte y otros gastos.
No obstante, el Estado también reguló los costos de la comida para las aves de corral, lo cual al parecer no sirve de mucho, pues los mismos productores aseguran que con esta medida el artículo comenzará a escasear y crecerá la corrupción y el aprovechamiento en cuanto a su distribución.
José Echeverría, presidente de la Asociación Venezolana de Comerciantes a Cielo Abierto, explicó que los productores que aprovechaban los mercaditos para vender sus huevos han dejado de hacerlo por las pérdidas que les genera a la inversión.
“Hasta el domingo pasado se vendieron huevos, muy pocos pero se vendieron, este fin de semana no tuvimos nada”.
Añadió que en el mercado que dirige todos los domingos en la avenida Francisco de Miranda, se cuenta con 10 expendedores de huevos, los cuales se manejan con cupos en las granjas y revenden la mercancía, y ninguno pudo conseguir para ayer.
“Ahora sí vamos a empezar a ver el precio abuso. La gente va a comprar huevos donde los consiga y si antes estaban caros, ahora el precio será mayor”.
Ni en las calles
El equipo de Avance realizó un recorrido por las calles de Los Teques, con la finalidad de precisar a aquellos hueveros que ofrecían el producto de manera informal.
No se observó ni uno, y al preguntar a los otros buhoneros circundantes, estos aseguraron que desde que se decretó la regulación sus colegas no han vuelto a sus puestos por temor a perder la inversión.
En páginas y grupos de compra-venta en internet y redes sociales, el cartón alcanza un valor aproximado de Bs. 1.200. Estos atrevidos vendedores ofrecen su producto con mucho cuidado, pues la Sundde anunció que será implacable con los “ciberbachaqueros”./ac
Por: Samuel Pérez/Foto: Daniel Linares