El Síndrome de West o espasmos infantiles son convulsiones que se presentan durante el período de lactancia, entre los dos meses a un año de edad.
“Los espasmos se caracterizan por la flexión súbita de los brazos, flexión anterógrada del tronco, extensión de las piernas e hipsarritmia, la cual se refleja en la electroencefalografía”.
Así lo explicó la doctora especialista en pediatría Cristina Victorio, quien señaló que las convulsiones pueden tener una duración de pocos segundos, sin embargo, se pueden presentar múltiples episodios en un solo día.
“La causa de la aparición del síndrome se le suele deber a trastornos cerebrales o anomalías durante la gestación, como lo son lesiones o malformaciones encefálicas y trastornos metabólicos. En ocasiones es difícil dictaminar una causa exacta”, indicó.
Los niños que sufren de estos espasmos, a futuro, suelen tener retrasos en su desarrollo cognitivo y motor, por lo requieren de terapias.
Cada 10 de abril, se conmemora el Día Mundial del Síndrome de West, donde se realizan actividades y congresos que permiten informar a la población acerca de él. /AGC/at