El clima montañoso de los Altos Mirandinos espera por vacacionistas

MARIANA BERMUDEZ

La mejor manera de comenzar el año para algunos es con un viaje o una salida a un lugar desconocido. Una paradisiaca playa o las montañas alejadas de la ciudad son una buena opción.

Ahora, para quienes prefieren no apartarse demasiado de los Altos Mirandinos por motivos de trabajo, falta de tiempo, entre otras, también tienen opciones de distracción dentro de la misma subregión o en zonas adyacentes. 

A solo 40 minutos de Los Teques, en carro particular, está El Jarillo. En todo el camino, se pueden apreciar hermosas vistas, caídas de agua y un clima montañoso.

Otro de los atractivos son las casas que por su antigüedad, tienen una arquitectura colonial venezolana.

Para quienes son más aventureros, la práctica de lanzarse en parapente es un deporte que se puede llevar a cabo también en la zona, de la mano de expertos, en el llamado “Despegadero” de El Jarillo, junto a la escultura de la virgen del Carmen, patrona de la población. 

Veinte minutos dura esta placentera experiencia que acumula más de 50 interesados los fines de semana.

Zonas cálidas

En la misma zona, luego de pasar el Parque Nacional Macarao, se localiza la Colonia Tovar, para quienes deseen un destino más ajetreado.

Esta zona, poblada por colonos alemanes, cuenta con construcciones arquitectónicas típicas de sus primeros habitantes europeos, que transportan a los turistas a una antigua Alemania.

Moteles, posadas y tiendas, son algunas de las que se pueden nombrar. Cabe destacar que entre las más visitadas está la iglesia ubicada en la plaza Bolívar, que hasta horas de la noche recibe a los visitantes.

Otras de las bondades que ofrecen quienes hacen vida del turismo en la zona, es la gran variedad gastronómica. Desde embutidos, cervezas artesanales, hasta dulces, mermeladas y las tradicionales fresas con crema, se pueden disfrutar. 

Parque Nacional Macarao

Este parque abarca las cuencas de los ríos Macarao, San Pedro y Jarillo. Su extensión es de 15.000 hectáreas y en él hacen vida gran cantidad de especies, entre las que resaltan aves principalmente.

Otro de los atractivos con los que se pueden maravillar sus visitantes es la flora variada y extraordinarios paisajes montañosos. 

Templos y Plazas

Quienes deseen hacer visitas a templos y experiencias más religiosas, Los Teques cuenta con variedad de templos que a principio de año se llenan de devotos para las misas de inicio de año y el día de Reyes.

Entre las más visitadas está la Catedral San Felipe Neri, la Parroquial de San Diego y la San Juan Bautista. Estas son reconocidas por su belleza y antigüedad.

Otros Lugares de esparcimiento, principalmente para los más pequeños, son las plazas. Las plazas Miranda y Bolívar están vistosamente decoradas con motivos decembrinos y son ideales para pasar una tarde de domingo de distracción. 

El Parque Gustavo Knoop, también llamado cariñosamente “Los Coquitos” sigue siendo una opción, más ahora que se le ha hecho mantenimiento y fue decorado para la temporada navideña.

Pozo de Rosas

En la vía de San Pedro, se encuentra Pozo de Rosas. Un clima frío y fresco acompañará una tranquila caminata por sus senderos y ríos. 

Se puede culminar la salida con un almuerzo o cena en alguno de los restaurantes, que cuentan que buenas atenciones para los visitantes.

Sol y arena

Quienes son más amantes del sol, playa y arena y disfrutan dar la bienvenida al nuevo año con baño de agua salada tienen la módica opción que ofrece el servicio de transporte del terminal de La Hoyada.

Y es que todos los fines de semana a partir de las 6 am pueden abordar buses cuyos destinos son las playas del estado Vargas. Destinadas a estar de vuelta ya para las 5 pm, los costos de los pasajes para esta aventura es a partir de Bs 1.000 por persona. /gf