Los 244 años de la elevación como parroquia eclesiástica

ARTURO TOVAR

“El 21 de Octubre celebramos en Los Teques los 244 años de su elevación como parroquia eclesiástica, esto ayudó sin duda a la construcción geopolítica de la ciudad que tenemos actualmente. Sin embargo, nuestra historia data de muchos más años atrás, en principio este era un territorio de habitación de la nación ‘Teques’, perteneciente a la familia Caribe, nuestro nombre lo recibimos por los Conopoima, que se ubicaba en la zona que hoy conocemos como El Nacional”.

Así lo relata al Diario Avance el cronista de la ciudad, Manuel Almeida, quien también narra como fue la fundación de lo que hoy conocemos como la parroquia San Felipe Neri.

“Los primeros españoles que llegaron se da a finales del siglo XVI, ellos comienzan a hacer vida en Corozal, lo que hoy conocemos como Túnel 10, ese era el centro poblado más importante de la ciudad, allí vivían aproximadamente unas 45 o 50 familias, a ese lugar donde llega el obispo Mariano Martí, quien funda la parroquia eclesiástica. Nuestra Señora de la Asunción. Luego el vicario de la Arquidiócesis, José Gabriel Lindo, la nombra la Parroquia San Felipe Neri y en 1790 ocurre el primer hito histórico, que fue la mudanza de la catedral de Corozal hacia El Pueblo, lugar en el que se ubica actualmente”, relata. 

El historiador y cronista, Leonel Vargas, cuenta parte de la historia de arquitecturas de connotada relevancia que trascendieron épocas en la capital mirandina.

“Desde 1960 se comenzó con un plan de reorganización de la ciudad y se pensó que el modernismo llegó sin embargo, eso no fue así. Antonio Bertorelli Cisneros empezó a tumbar una serie de fachadas históricas en esta región, quitó la estación del tren en la Bermúdez, entre otros muchos cambios que pretendieron hacer crecer a la ciudad pero que en lugar de mejorarla, creo yo que la deterioraron y le quitaron su virtud de pueblo”, explica.

Añade que el Parque Gustavo Knoop no surgió de forma natural, sino que fue precisamente creado por “el ingeniero Gustavo, quien fue el presidente del Sistema Ferroviario de Venezuela, él era ciudadano alemán, consciente del ecocidio que se dio con la creación de las estaciones a finales del siglo XIX, decidió traer todas esas especies arboleas de diferentes lugares del mundo y sembró más de 14 hectáreas de terreno con más de 500 mil especies de árboles, este fue el primer jardín botánico de Venezuela y está acá en Los Teques”.

Entre otros espacios históricos, resalta también lo que fue “la creación del Gran Ferrocarril de Venezuela, fue el proyecto más grande de Venezuela para la época porque conectaba las ciudades más importante de aquel entonces que eran Caracas y Valencia, poniendo a este territorio como una ciudad de tránsito importante”.

Asegura que el sanatorio Padre Cabrera fue otro de los lugares que marcaron época, ya que “por las bondades del clima de Los Teques, la sociedad médica llegó a la conclusión en aquel momento de que este era un lugar propicio para curar enfermedades del pecho, como la tuberculosis, por ello vinieron connotados del ámbito cultural y político, como Arturo Michelena, Teresa de la Parra, entre muchos otros”.

La presidenta de la Fundación Hijos de la Unión, Milagros Bandes, considera que en Los Teques han vivido personajes que dejaron “su huella en la historia, como lo fue Tomás el de “La Carreta”, el recorría todo el pueblo con su carreta haciendo mandados y encomienda, todo el mundo sabía que él venía por el sonido de su carreta. Francisco “El Chichero” que vendió su producto durante muchos años y era conocido y querido por todos. Tambíen el viejo Encarnación “El Frutero”. María “La Loca” y muchas personas más que dejaron huellas imborrables en la memoria de nuestra ciudad.

Señala que muchos tequeños han sido condecorados con la orden Hijos Honorables de Los Teques, que honra a personajes que por su labor y conducta intachable, son inolvidables para la ciudad.

Salvar a la ciudad

Los tres estudiosos de la historia quisieron tomar la oportunidad que brinda el aniversario 244 de Los Teques como parroquia eclesiástica, para pedir a las autoridades y vecinos, un trato más digno para la ciudad.

Milagros Bandes, “este territorio necesita mucho más amor, debemos rescatar nuestro pulmón vegetal, que es el parque Gustavo Knoop. Rescatemos los pocos patrimonios que nos quedan, por ejemplo, el antiguo edificio de la Sanidad,  los podemos salvar con un poco de amor”.

Manuel Almeida, “nosotros podemos crecer mucho en el área patrimonial, la región puede recontruirse asimisma, a partir de su ancestralidad, gentilicio y valores que la fortalecen. Nuestro valor cultural trasciende la colonia, este pueblo ha sido demasiado importante para el país”.

Leonel Vargas, “nosotros no dejamos de ser un pueblo, pese a los intentos de modernización, yo creo que es hora de que todos nos sumemos para dar a esta ciudad más paz y cariño”.