Violencia sexual contra menores enciende las alarmas en el Cicpc

RONALD PEÑARANDA

Entre dos y tres casos diarios relacionados con abuso sexual, actos lascivos y trato cruel contra menores de edad, publica en sus redes sociales el director nacional del Cuerpo de Investigaciones, Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), Douglas Rico.

E incluso en los úlitmos días el funcionario activó una campaña contra los citados delitos y en sus cuentas de Instagram y Twitter se pueden leer mensajes como: “Sin tregua con los pedófilos”, “por su seguridad nunca deje a niños pequeños solos o desatendidos. Cuando los deje en algún lugar, asegúrese que estén bajo el cuidado de una persona de confianza”.

También: “No al abuso sexual infantil, detenerlo es tarea de todos”; “Todo el peso de la ley para quienes intentan dañar de cualquier manera la tranquilidad de nuestros niños”.

Precisamente este jueves 27 de septiembre abogados del Cicpc iniciaron una primera mesa de trabajo para elevar una propuesta que sea incluida en la Ley Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes (Lopnna).

Rico sostiene que ante la preocupación de los continuos delitos cometidos contra niños y adolescentes buscan elaborar un informe que luego será presentado al ministro de Interiores, Justicia y Paz Néstor Reverol.

Señala que durante el debate se aportaron conocimientos y estrategias en materia de trato cruel, bullying, violencia psicológica, actos lascivos, sexting, sextorsión y grooming, éste último es una práctica de acoso y abuso sexual contra infantes y jóvenes que en la mayoría de los casos sucede a través de los redes sociales.

Castigo ejemplar

En febrero de este año el Tribunal Segundo de Juicio de Miranda condenó a 20 años de prisión a Jhonathan Alfredo Torres Requena (25) por abusar sexualmente de una muchachita de 12  años en Los Teques.

El 14 de noviembre de 2013, la menor organizó un matiné en su casa y a través de las redes sociales invitó a sus compañeros de liceo y a particulares, entre esos al agresor.

Durante la fiesta donde todo el grupo estaba consumiendo bebidas alcohólicas,  Torres Requena le manifestó a la joven que supuestamente estaban robando en uno de los cuartos.

La  pequeña fue a ver la situación junto al hombre y al entrar a la habitación el sujeto cerró la puerta, forcejeó con ella quien estaba mareada y la ultrajó. Por si fuera poco  la amenazó con matarla si contaba lo sucedido.

Pero la joven no se quedó callada, le contó a su madre y a los cuatro días del hecho hicieron la denuncia en la Fiscalía. Le practicaron un examen y se comprobó que la menor fue abusada. De inmediato el Tribunal Quinto de Control emitió una orden de captura.

Pasaron cuatro año, el 12 de diciembre de 2017 el aberrado fue detenido en un punto de control instalado en la Zona Industrial El Tambor de la capital mirandina.

En el juicio, la Fiscalía 12 ratificó la acusación contra el hombre, por la comisión del delito de violencia sexual agravada. En este momento está cumpliendo la sentencia en en el Centro Penitenciario de Tocuyito (Carabobo).

El entrenador abusador

En octubre del año 2014, condenaron a 30 años de prisión a Leonardo Belisario (53) por cometer actos lascivos contra ocho estudiantes de la Unidad Educativa José Manuel Álvarez de Carrizal quienes también practicaban gimnasia.

El individuo quien era profesor de  educación física y además entrenador de las niñas, cuyas edades oscilaban entre 9 y 13 años. Les pidió a ellas que se desnudaran para tomarles fotos.

Las chicas tampoco guardaron silencio, revelaron la amarga experiencia a sus padres y éstos denunciaron el caso ante el Consejo Muncipal de Derecho de Niño, Niña y Adolescente que de inmediato avisó a Policarrizal y éste organismo procedió a la detención del instructor.

Policías allanaron su vivienda y encontraron cámaras fotográficas, pendrives, dos celulares y dos tarjetas de memoria, en los que había más de mil imágenes con material pornográfico infantil.

El Tribunal Primero de Juicio de Miranda dio la sentencia por los delitos de actos lascivos en perjuicio de tres víctimas y pornografía infantil en la modalidad de fomento. Lo mandaron para la cárcel de Yare II.

Casos como los ya relatado ocurren con frecuencia no solo en los Altos Mirandinos sino en el resto de regiones del país.

Fatales consecuencias

Lienis Peñaranda, psicóloga, consultada por el diario Avance sobre las consecuencias que trae a las víctimas de este tipo de violencia, manifesta que a nivel emocional son muchas. “Puede desencadenar situaciones como suicidio consumo de drogas y alcohol, y trastornos de identidad”.

“Al joven abusado también le podría ocasionar depresión,  ansiedad, baja autoestima, dificultades para expresar sus emociones, además estrés postraumático e indefensión aprendida”.

Añade que también puede generar problemas en sus relaciones interpersonales, desconfianza en los demás y aislamiento.

“Por otro lado fobias sexuales, disfunciones sexuales, usualmente dificultad o falta de satisfacción sexual (orgasmos, alteraciones en la motivación sexual: deficiencia o exceso). Mayor posibilidad de sufrir violación, adicciones sexuales e igualmente dificultades para establecer relaciones sexuales sanas”, recalca la especialista que tiene su propio consultorio.

Subraya que en sus 12 años de trayectoria profesional, le ha tocado atender casos relacionados con ese tipo de conductas. “Yo he tenido pacientes abusados pero que no llegan a mi por ese problema sino por las consecuencias a largo plazo”.

Además ha lidiado con casos de menores abandonados que fueron abusados o de adoptados que fueron víctimas de abuso, “u otros que viven en familias disfuncionales en los que he llegado a sospechar que han sufrido de abuso sexual”.

Cuando se le preguntó sobre las recomendaciones para evitar el abuso sexual infantil y juvenil respondió que hay infinitas pero por cuestiones de espacio solo citará unas cuentas.

“A los padres les recomiendo hablar con claridad a sus hijos acerca de los riesgos que los rodean, bríndarle confianza. Debe mantenerse alerta y observador durante las salidas al parque o a la casa de amigos e incluso al colegio”.

Precisó que deben establecerse con los hijos protocolos de acción en caso de sentirse amenazado o abusado. Explíquele a dónde o a quién debe acudir en estos casos si no hay algún familiar o persona de confianza cerca”.

“Enseñalarle a los muchachos que existen partes del cuerpo íntimas, eso fortalece su autoestima, es decir educación sexual acorde a su etapa de desarrollo. Enseñele la diferencia entre secretos malos y buenos, supervisar los sitios web que visitan. Que aprendan a no aceptar regalos a cambio de favores”.

Asimismo sugiere asistir a talleres psicoeducativos o escuela para padres para estar informado sobre cómo manejar temas relacionados son la crianza y enfrentarse a todo tipo  de realidades sociales. Foto: Jesús Tovar