En el año 2010 en el sector El Codo, ubicado en el kilómetro 31 de la carretera Panamericana, un árbol cayó sobre un poste del servicio eléctrico y fue a parar a un barranco.
Días después la estructura fue reparada por el equipo técnico de Corpoelec, pero con el transcurrir del tiempo se ha ido inclinando porque la base no está lo suficientemente reforzada, dijo Nora Barrios, residente del lugar.
Manifestó que las líneas de alta tensión están flojas y al chocar unas con otras por el efecto de la brisa hacen chispa poniendo en riesgo cuatro casas que están cercas.
“Ya dos arboles se incendiaron y tuvimos que retirarlos, la situación ocurre al menos dos veces cada mes. De forma estratégica guardamos todas las bombonas de gas en una de las casas por temor a que los cables caigan encima de ellas y se genere una explosión”, destacó.
Señaló que han solicitado a la empresa la revisión urgente de la estabilidad de los postes para volver a apretar las guayas. “Nos responden que esperemos porque en cualquier momento llegará un técnico que jamás viene”./RF/rp
Fotógrafa: Yuliettsha Molina.