Hoy en día parece que la constante batalla es con nosotros mismo y el eterno acompañante, el pensamiento. Ante tanta presión la rumia mental emerge como un fenómeno intrigante y, a menudo, incomprendido, que al desbloquear la mente se libera el poder de los pensamientos.

Para la Coach Rhaiza Medina, la rumia mental “puede describirse como ese bucle interminable de pensamientos repetitivos y negativos que parecen atraparnos en un ciclo de preocupación y ansiedad. Es como estar en una habitación oscura, donde cada pensamiento es un eco resonante que parece amplificar nuestro malestar emocional y tener el control”.

Medina invita a ver la rumiación mental desde una perspectiva innovadora, en lugar de verla como un enemigo a vencer. “Qué tal si la vemos como una oportunidad para el crecimiento personal, ya que puede ser una señal de que algo en nuestra vida necesita ser abordado o comprendido de manera más profunda”.

La especialista comentó que la rumia mental no tiene por qué ser un callejón sin salida. Con el enfoque adecuado y las herramientas acordes, se puede transformar. “Este desafío en una oportunidad para cultivar una mayor autoconciencia, comprensión y autenticidad en nuestras vidas”.

Medina invitó a utilizar la energía que se gasta en la rumia mental, en generar acciones transformadoras, y avanzar en los objetivos o resolver un problema que preocupa.

Dijo que es importante practicar la atención plena, en lugar de dejarse arrastrar por los pensamientos. Verlos como oportunidades para crecer.

Canalizarlos a través de la creatividad y la expresión. La conexión social es importante, porque se logra compartir y recibir apoyo emocional. Finalmente, invitó a practicar la gratitud y la celebración, para reflexionar sobre lo que se está agradecido. “Cuando te vuelvas a sentir atrapado en los pensamientos, puede ser el comienzo de un viaje hacia un yo más profundo, hacia una vida más significativa”