Periodismo de Soluciones

Brasil inaugura su Mundial ante Croacia

Brazil Soccer WCup

Publicidad

Por:
Por:

admin

Comparte esta noticia

La Arena Corinthians recibía retoques a un día de escenificar la apertura del Mundial

Cuando suene el silbatazo inicial del Mundial, otra interrogante además del resultado que consiga el anfitrión Brasil contra Croacia es si la Arena Corinthians de Sao Paulo pasará la prueba después de los retrasos y problemas que tuvo durante su construcción. La sede del primer encuentro del Mundial de 2014 es toda una incertidumbre hasta para los propios organizadores. Muchos tienen dudas de si funcionará debidamente cuando sea llenado a su máxima capacidad —61.600 espectadores— y si éstos, incluyendo a jefes de estado y personalidades extranjeras, estarán a salvo. A un día de que ruede el balón, obreros de la prefectura de Sao Paulo aún daban los últimos toques tanto en el interior como en las afueras del complejo, inmerso en un suburbio y a más de una hora en carro del centro de Sao Paulo.

Las huellas de los retrasos eran evidentes: paredes sin retocar y cajas de cables tiradas por las tribunas, aunque el centro de prensa ya operativo comenzó a llenarse ayer debido a los reconocimientos de cancha que realizaban Brasil y Croacia. La organización y construcción de las sedes y obras de infraestructura en transporte han estado plagadas de cuestionamientos por los retrasos, aparte de la molestia de los brasileños por lo que consideran un despilfarro en los gastos para poner en marcha las obras y por los supuestos actos de corrupción.

De las 12 sedes, la que más dolores de cabeza generó a los organizadores fue precisamente la Arena Corinthians, también llamado Itaquerao, debido a los retrasos en la construcción y también por el drama que representó la muerte de tres obreros durante su ejecución.

Se trata de una obra inconclusa y que albergará el choque inaugural a pesar de que la FIFA no logró que se hiciese allí una prueba final con el estadio a su máxima capacidad, sino una con la mitad de espectadores el 1º de junio, pues las autoridades locales no habían expedido los permisos para utilizar unos graderíos temporales construidos para la cita mundialista.

Blatter elude hablar de corrupción

 El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, usó un discurso en el congreso anual del ente rector del fútbol mundial para exaltar la capacidad de este deporte para cambiar la vida de las personas, pero eludió hacer cualquier referencia específica a los escándalos que rodean a la organización. El dirigente suizo de 78 años no hizo mención a las acusaciones de soborno que rodean la exitosa candidatura de Catar para acoger la Copa del Mundo del 2022, que han empañado la antesala del torneo que se inicia hoy en Brasil. Las reuniones de la FIFA realizadas en Sao Paulo esta semana han puesto de relieve las profundas divisiones que existen en el organismo sobre si Blatter debería presentarse a la reelección en el 2015.

Sus palabras ante los delegados de las 209 asociaciones que integran la FIFA fueron de carácter general y principalmente se centraron en los beneficios del organismo y del fútbol en general. Blatter dijo que la FIFA tenía la responsabilidad de garantizar que el fútbol sea una positiva fuerza de cambio y explicó qué deber hacer el organismo para hacer que eso suceda.

“La respuesta es fácil y simple, tenemos que predicar con el ejemplo y tenemos que escuchar a todas las voces. Debemos ser responsables y rectos en todo lo que hacemos, debemos hacer lo correcto incluso si esto tiene un costo”, aseguró. “No siempre es fácil estar a la altura de este principio. Pero es nuestro deber. Si nosotros no lo hacemos, ¿quién lo hará?”.

200 millones de dólares en bonos

La FIFA repartirá 200 millones de dólares en concepto de bonos a sus federaciones nacionales y confederaciones, como parte de los 4.500 millones que recaudaría en el Mundial Brasil 2014. Cada uno de las 209 asociaciones miembros del organismo recibirá 250.000 dólares este mes y 500.000 adicionales inicios del próximo año, según trascendió durante el congreso anual de la FIFA. A su vez, las seis confederaciones continentales podrán embolsarse 2,5 millones este año y 4,5 millones extras en 2015, según las cifras desglosadas por Markus Kattner, director de finanzas de la FIFA.

Estos bonos representarían un aumento de 200.000 dólares con respecto a los montos que se repartieron tras el Mundial Suráfrica 2010, en los que cada miembro se embolsó 550.000 y las seis confederaciones recibieron 5 millones cada una. En su informe de ingresos, la FIFA informó que 2.700 millones corresponden a la venta de los derechos de televisión, y 2.300 millones son producto de patrocinios y licencias.

Noticias relacionadas