El Centro de Justicia y Paz (Cepaz) denunció que cada nueve días fue asesinada una niña durante el año 2022. En total fueron 37 asesinatos de niñas de acuerdo al informe anual de la organización publicado el jueves 6 de abril.

El informe contabilizó en total 282 asesinatos de mujeres de diferentes edades durante el año pasado y destacó que 22 de las 37 víctimas menores de edad tenían menos de 5 años. 

De los 282 asesinatos de mujeres, el Cepaz determinó que las víctimas que constituyeron los “grupos etarios más vulnerables” fueron las 37 niñas contabilizadas junto a 14 mujeres de entre 70 y 85 años. 

Además, destacó que 18 % del total de mujeres asesinadas eran madres, lo que derivó en que 82 niños y adolescentes quedaran huérfanos. 

Sobre el asesinato de venezolanas en el exterior, la organización señaló que del 1 de enero al 31 de diciembre del año pasado se documentaron 79 casos. En promedio hubo una acción feminicida cada cuatro días. 

Por otra parte, Cepaz indicó que la mayor incidencia de edad entre los agresores se ubicó entre 19 a 52 años, equivalente al 24,1 %. 

Solo el 33 % de los agresores fue aprehendido, mientras que en el 42,2 % de los casos los agresores se dieron a la fuga y en 9,9 %  de los casos el agresor murió en el contexto de los hechos. 

De acuerdo al informe del Cepaz, en el 17 % de los casos la motivación fue una escena de celos o alegato de infidelidad íntima, mientras que en el 6,7 % de los casos la venganza de organizaciones criminales. 

Un 6 % de los femicidios registró como motivación el hecho de que la víctima había decidido separarse de la relación y en otro 6 % de los casos hubo ataque o agresión sexual, mientras que un 3,5 % registró un femicidio en medio de violencia obstétrica.

Debido a ello, el Cepaz pidió al Gobierno de Nicolás Maduro generar registro de este tipo de asesinatos, no solo para evaluar la situación de violencia contra las mujeres, sino para plantear “programas preventivos idóneos”. 

“Se requiere que el Estado genere registros detallados y estadísticas de los femicidios, pues de ello depende, en gran medida, la comprensión de los fenómenos asociados a este delito. Estos datos permiten identificar las características de la víctima, el victimario y el entorno, establecer la relación entre ellos, las posibles motivaciones e incluso las pautas de comportamiento, con miras no solo a evaluar la situación de la violencia contra las mujeres, sino de plantear programas preventivos idóneos”, reza el texto.