Dicen que los sueños se hacen realidad si crees en ti, en tus capacidades, ganas de alcanzarlos y si estás dispuesto a guerrear ante cualquier adversidad. Clara Vásquez es una muestra de ello, una joven que desde que descubrió que tiene magia en sus manos, ha luchado contra viento y marea para sacar adelante su maravilloso emprendimiento.

Una mujer que brilla con luz propia, amigable, dulce como todas sus creaciones y con un alma llena de energía. Clara, con tan solo 27 años, se ha convertido en una emprendedora digna de llevar el título de valiosa de nuestra ciudad.

Esta gran pastelera, repostera, manualista, estudiante de cocina y medicina, nació en Caracas, pero fue criada en los Altos Mirandinos. “Estudie mi bachillerato en el María Briceño y en el Edith Stein en La Rosaleda Sur, donde me gradué”.

“En la actualidad me encuentro estudiando el quinto año de la carrera de Medicina en la Universidad Central de Venezuela (UCV), específicamente en la Escuela Vargas”.

El entusiasmo por los dulces inició a sus 10 años de edad, cuando veía a su tía realizar tortas en Araira, municipio Zamora. “Ella me enseñó a hacerlas con refresco de colita y a mí me gustó mucho y así aprendí, viéndola, ahí quedó el gusanito de la curiosidad”.

Apasionada al mil por ciento por la comida y los dulces, empezó haciendo tortas básicas en su casa hasta que al pisar los 19 años, en paralelo con la universidad, decidió hacer un curso de repostería que la nutrió un poquito más en lo que realmente le gustaba.

“La que me enseñó se llama Isabel, ahí aprendí desde cómo enchufar la batidora hasta hacer tortas de matrimonio y de gala, un curso súper completo que duró alrededor de 5 meses, recuerdo que eran todos los sábados desde las 8:00 am hasta las 5:00 pm”.

Posterior a eso, hizo varios cursos de cupcakes y modelado de figuras, este último no lo pudo terminar debido a que se le rompió el tendón de Aquiles, y estando en muletas se le complicaba; sin embargo, fue autodidacta y optó por buscar apoyo en Youtube, donde aprendió muchísimo más.

No fue sino hasta febrero de 2015, cuando esta imponente mujer se graduó como pastelera en el Centro de Estudios Culinarios San Antonio (Cecsa), donde se certificó para trabajar en panaderías y pastelerías a nivel nacional e internacional.

“El año pasado por problemas de salud tuve que retirar el año de Medicina; y como luego de las operaciones no pude retomar estudios inmediatamente, entonces para aprovechar el tiempo decidí instruirme en cocina; hice mi primer año, ya voy por el intermedio y con el favor de Dios, el año que viene me gradúo de Profesional en Estudios Culinarios”.

Relató que a mediados de este año, comenzó a materializarse uno de sus sueños más preciados: tener su propio negocio. El 21 de junio firmó contrato en el Mercadito de Los Castores, “a pesar de que sea algo muy sencillo, para mí ha sido un logro muy grande”.

Bocaditos del Cielo

A pasitos pequeños pero firmes, se ha dado a conocer poco a poco. Ahorita tiene su propia marca Bocaditos del Cielo, donde ofrece sus productos de repostería y pastelería general y artística (@bocaditosdelcielo21), pero en el mercado la conocen como “La Muchacha de Los Dulces”.

En paralelo a todo lo que venía contando, añadió que desde siempre tuvo curiosidad por las manualidades y la bisutería. “Viendo una película, me enamoré de una pulsera, pero la vendían fuera del país y era muy costosa traerla, entonces intenté hacerla”.

Le compraron los materiales y ahí puso su creatividad a volar. “Hice un rombo que quedó feo, pero lo tengo guardado de recuerdo, luego, otra vez gracias a Youtube y a mi imaginación, me fui puliendo hasta hacer estas piezas”.

Cadenas, zarcillos, dijes, collares, pulseras; son solo algunas de las maravillosas piezas que las manos de Clara realiza para ver la sonrisa y satisfacción de sus clientes, que se convierten en su mejor recompensa.

Entre risas, confesó que su hermana Vanesa es su modelo. “Ella es muy coqueta y cada cosa que hago le digo que me dé su opinión, que lo critique, es mi colaboradora; de hecho, muchas de las cosas que hago ella se las queda y las tengo que repetir”.

Con un brillo en sus ojos, reveló que hace cinco años, se vio plasmado uno de sus sueños, su propia marca CM Diseños Bisutería y Accesorios (@cmdisenos1). “Alejandro, un amigo con el que nadaba, fue el que me diseñó el logo, incluso me hizo unas camisas”.

Reveló que, a pesar de que en sus inicios no tuvo tanto repunte, en su universidad, en la de su mamá y la de su hermana ha sido donde ha logrado vender sus propias creaciones. También ha participado en ferias exponiendo sus bellezas.

Ejemplo de vida

“Apenas abrí el Instagram, la visión fue diferente debido a que las piezas fueron saliendo, he hecho promociones y se ha notado el avance, lo que me ayudó a surgir más fue una página que me contactó y me dio a conocer; de ahí me he enfocado también en ser community manager”.

De aquí a cinco años, esta increíble mujer se ve graduada de médico y chef. Quiere hacer un posgrado en Oftalmología, tener su propia pastelería y seguir con su línea de CM Diseños, que para ella es fundamental.

Clara es indiscutiblemente una guerrera de vida, pero con todos los hierros, ha tenido una diversidad de eventos fuertes a nivel de salud que le han dejado como enseñanza que puede lidiar con muchas cosas.

El año pasado fue operada dos veces, una de ellas fue de cáncer de tiroides y la otra a raíz de la metástasis. “Tuve que meter muchas cartas para que me dejaran en la universidad porque querían que retirara todo el año, y al mismo tiempo estudié cocina porque no me quería quedar sin hacer nada”.

Para ella perder el tiempo es algo imperdonable, considera que a veces las vicisitudes y los malos ratos enseñan hasta dónde se puede llegar y todo lo que puedes dar. “En esos momentos descubres que puedes dar más de lo que creías”.

“Soy de esas personas que cuando se propone algo lo consigue pese a todo, malestares, cansancios, dolores y los tubos en el cuello. Me arropo hasta donde me llegue la cobija, pero sin conformarme, el conformismo es algo con lo que yo no me veo. No hay nada imposible en esta vida, solo la pared que te pongas en frente”.

Para cerrar esta maravillosa entrevista, aconsejó a quienes tienen un sueño, no perderlo. “Cuando ves el fruto de tu trabajo y el de tus sacrificios es increíble. Al principio es difícil y cuesta mantenerse, solo debes ser constante de la manera correcta, sin engaños y sin dejar la humildad”./ac

Fotos: William Sánchez

**Entre dulces, bisuterías y accesorios, pasan los días de esta guerrera

ROSANGEL REBOLLEDO