Ania Pulido, nutricionista, informó que el consumo excesivo de alimentos sobrecargados en sal conlleva a una de las enfermedades más importantes que es la hipertensión, por lo que se sugiere tener un uso moderado de la misma.

“Todos aquellos que ya tengan diagnosticada la hipertensión deben evitar consumir alimentos ricos en sodio o sal, así como mortadela, boloña, salchicha y jamón que son industrializados”.

Asimismo, mencionó que se deben evitar los quesos artesanales, puesto que no controlan cuanta sal tienen; también entran en la lista los enlatados y alimentos procesados como salsas, sazonadores, aderezos y sopas de sobre.

Posteriormente, puntualizó que una de las cosas importantes es que el paciente aprenda a aliñar los alimentos con ingredientes naturales, como ají, cilantro, ajoporro, cebolla, ajo y esencias aromáticas.

“Aquellos que deben tener el consumo moderado de sal no deben ingerir bebidas de reposición energéticas, debido a que contienen una cantidad importante de sodio y puede ocasionar que se le suba la tensión, en caso del que paciente fuera propenso a esto”.

A la par, agregó que “es importante la prevención en la edad adulta y en aquellos que padecen de hipertensión, por su predisposición”.

Para finalizar, informó que una dieta balanceada y equilibrada contrarresta totalmente el consumo elevado de sodio y previene enfermedades./RR/no