“Compramos el botellón en el establecimiento Súper Market Casa Blanca ubicado en recta de Las Minas, San Antonio, el envase venía con una tapa supuestamente para sellar pero cuando lo destapamos el olor que emanaba era de agua podrida”.

Así lo denunció Miguel Quintero, médico de profesión, quien calificó el incidente como un “atentado a la vida”.

Explicó que al adquirir el envase procedió a hervir el agua para eliminar las bacterias que pudiera contener, sin embargo los resultados no fueron los esperados puesto que el liquido seguía teniendo un sabor y olor desagradables.

Aseguró estar convencido de que ese flujo es proveniente de un chorro por lo que hizo un llamado a los encargados del local donde se esta comercializando para que saquen del inventario todos los potes que quedan, y llamó a las autoridades a investigar de donde provienen y tomar cartas legales en contra de la empresa.

El alcalde de Los Salias José “Josy” Fernández, se pronunció sobre el caso indicando que “enviamos a funcionarios de la División de Ambiente del municipio al sitio en cuestión donde se adquirieron estos botellones para que consignen uno al Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC) y hagan el estudio sobre esa agua”.

Por otra parte, reseñó que no considera que la culpa sea de los comerciantes sino de unos distribuidores “poco meticulosos que agarran los vacíos, no los llevan a las empresas para que les apliquen todo el trabajo sanitario que necesitan los potes y los llenan ellos mismos.

Añadió que “estos grandes responsables deberían ir presos y nosotros vamos a llevar esto también a la policía municipal para que se detecte a las personas que están distribuyendo estos envases”.