En Centroamérica, Suramérica y Europa se observó de manera parcial
Un eclipse solar ocurre cuando la Luna se interpone entre la Tierra y el Sol, ocultando total o parcialmente la imagen del astro de la luz. En ese momento el diámetro aparente de la Luna es mayor que del Sol, bloqueando todos los rayos directos de la estrella, oscureciendo el día.
Si es total, en algunos lugares del mundo, el Sol queda completamente tapado por la Luna, debido a que por casualidad cósmica quedan en una distancia justa con el diámetro adecuado para que sus tamaños sean iguales.
Este lunes 21 de agosto de 2017, se pudo visualizar un eclipse solar total en Estados Unidos, de forma parcial en Centroamérica, así como en el norte de Suramérica y Europa. El 8 de junio de 1918 fue la última vez que un eclipse solar total se pudo ver en Norte América y el 26 de febrero de 1979 se observó uno, pero no fue parcial.
En esta oportunidad, en 14 estados de EEUU será total y en cincuenta parcial, por lo que el área de cobertura es el 16% del país.
Millones de sus habitantes fueron testigos del fenómeno astronómico del siglo, el primero en 99 años. Durante 89 minutos el Sol se ocultó lentamente y fue visible, de forma parcial, en México, Guatemala, Costa Rica, Colombia, Ecuador y Venezuela.
Expertos aseveran que el siguiente eclipse total visible desde la tierra tendrá lugar en enero de 2019, siendo Argentina y Chile los mejores países para contemplarlo. Y el próximo eclipse en Norte América ocurrirá en abril de 2024.
IVIC fue el epicentro para presenciarlo en los Altos Mirandinos
Decenas de personas, tanto de los Altos Mirandinos como de Caracas, se acercaron desde el medio día a las instalaciones del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (Ivic), en el Km 11 de la carretera Panamericana, para presenciar el hecho el cual se contempló de manera parcial en un 53%.
Antonio Vallesteros, coordinador de la Unidad de Divulgación y Socialización de la Física del Ivic, resaltó que desde hace siglos llaman mucho la atención. “El eclipse inició alrededor de las 2:28 de la tarde cuando la Luna comenzó a morder el Sol hasta alrededor de las 4:50 pm, momento en que se terminó de tapar por completo”.
Entre tanto, Vallesteros explicó que en el estado Nueva Esparta, en Venezuela, fue donde se pudo observar mucho mejor, gracias a su ubicación, puesto que se encuentra más al norte y estuvo eclipsado el Sol en un 60%.
Aseguró que para verlo se tomaron las siguientes precauciones, “no se debe utilizar por ningún motivo instrumentos ópticos como telescopios y binoculares sin filtros porque puede ocasionar hasta la pérdida de la vista; muchos no se dan cuenta al momento porque la retina no es sensible a la radiación tan fuerte y se quema, sin embargo al otro día se perciben problemas graves en la visión, por lo que se deben utilizar unos filtros de soldadura número 12 o 14 mínimo o lentes especiales que se venden específicamente para estas actividades”.
Describió que, “también trajimos unos equipos especiales para que lo observen en un monitor y aquellos que no tengan lentes puedan captarlo sin mirarlo directamente; aún con los lentes no se puede durar más de 15 a 20 segundos viéndolo, debe hacerse por periodos cortos porque indudablemente trae consecuencias para la vista”.
Destacó que los parciales en Venezuela ha habido varios, pero el último total pasó en Paraguaná, estado Falcón, en febrero de 1998, el cual fue bueno para Venezuela porque se vio hasta las estrellas de día y la corona del Sol, porque la Luna se alineaba perfectamente con el astro.
En los Estados Unidos, según el especialista, la NASA movió de sus posiciones 11 satélites para observar este fenómeno y también instalaron un telescopio infrarrojo en un avión para seguir la sombra solar, “y por supuesto pueden durar más tiempo en observación y hasta tomar fotografías para hacer distintos estudios”.
Un fenómeno para disfrutar
Jesús Suárez, habitante de San Antonio de Los Altos, quien participó de la actividad en el Ivic, junto a su esposa e hijos, manifestó que presenciar esta ausencia de luz es una experiencia que muy pocas veces se puede disfrutar en la vida, “y pienso que es importante enseñarle a los niños sobre los astros y lo que sucede en el Universo, ya que es algo muy interesante que complementa su educación”.
Del mismo modo, Luisa Padrón, vecina de San Pedro de Los Altos, indicó que “vine con mis nietos porque quiero que conozcan este fenómeno que es muy bonito e interesante, es un momento que contribuye para que los pequeñines aprendan sobre nuestro Sistema Solar, además la actividad esta muy bien organizada, me gustó muchísimo”.
Finalmente Elizabeth Hernández, resaltó que, “estoy aquí honrada, esto es un fenómeno que implica una historia; además realizaron una actividad muy bien organizada, me encanta que un instituto como el Ivic preste sus instalaciones para actividades como estas, porque nos llena de satisfacción y cultura”./AP/no/Foto: Alexander Offerman/