El Gobierno de Estados Unidos se mostró preocupado y alertó, este viernes 1º de noviembre, sobre la “creciente presencia” en Venezuela de la guerrilla colombiana Ejército de Liberación Nacional (ELN), a la vez que acusó a Caracas de ofrecer un “ambiente permisivo” para grupos terroristas, entre los que citó a disidentes de las Farc y seguidores de la organización chiíta libanesa Hezbolá.
“Las fronteras porosas (de Venezuela) ofrecieron un ambiente permisivo” para los grupos que EE UU denomina “terroristas”, expuso un informe, basado en información recopilada por el gobierno estadounidense el año pasado.
Los lazos financieros entre los disidentes de las Farc, el ELN y otros grupos paramilitares “facilitaron la corrupción pública y esquemas de sobornos a funcionarios del gobierno venezolano y miembros de las fuerzas armadas”, escribió el departamento de Estado en el reporte publicado el viernes.
El informe también afirma que, tanto personas ligadas a los grupos guerrilleros, como “partidarios” y simpatizantes del grupo libanés Hezbollah, denominado como terrorista por EE UU, tienen presencia en Venezuela. Reseñó el diario Panorama.