Temen que la medida dictada por el Gobierno se aplique en locales de los Altos

Ayer arrancó la jornada de inspección a 709 panaderías de Caracas para controlar presunta mafia de panaderos. El presidente y vicepresidente de la República, Nicolás Maduro y Tareck El Aissami, detallaron que el 90% de la materia prima debe ser destinada para la elaboración del pan salado, mientras que el 10% restante es para dulces y cachitos.

Asimismo, indicaron que todo aquel local que no cumpla con lo reglamentado será tomado por el Gobierno y se entregará a los Comités Locales de Abastecimiento de Abastecimiento y Producción (CLAP).

Ante esta medida, panaderías de los Altos se mostraron preocupados, a pesar de que la normativa solo aplica para comerciantes de la capital venezolana, aseguran que temen que sea establecida en los tres municipios y denunciaron no disponer de la materia prima necesaria para poder cumplir con esta nueva ley.

Tal es el caso del comercial Prestige, ubicado en San Antonio, donde desde hace dos semanas no se vende pan por no contar con el trigo. José Maldonado, encargado del comercio aseguró que son muchos los clientes que se quejan de la existencia de dulces y cachitos pero no del tan buscado salado, sin embargo, elaboran estos productos con masa que pueden guardar para toda la semana en neveras.

“Por lo pronto estamos parados en la venta del pan y seguiremos así hasta que nos surtan, aunque lo poco que nos traen no nos permite vender para todo el día porque se acabaría en el primer momento, el Presidente puede decir misa, pero si no tenemos materia prima ¿con qué se va a hacer pan?”, agregó el comerciante.

Seguidamente, Manuel Díaz, gerente de la panadería y pastelería Reina del Negro, del municipio Carrizal, comentó que durante el mes de marzo solo les han llegado 23 sacos, “y para producir pan y venderlo corrido se necesitan mínimo 10 sacos diarios”.

Por último en el municipio Guaicaipuro, Adelino Goncalves, encargado de Miquilena, quien abrió sus puertas al equipo de Avance para evidenciar sus anaqueles vacios, contó que desde hace aproximadamente tres meses no les surten la harina de trigo, “tenemos que sacarle fotocopia a los tres sacos que nos quedan para poder rendirlo”.

Explicó que los dulces y cachitos son elaborados con mucho menos harina que el pan por lo que salen en mayor cantidad, además de tener menos demanda.

Finalmente, Antonio Di Carlo de un establecimiento de El Cabotaje, indicó que “si hago pan y lo vendo a las 6:00 am ya a las 6:30 am no tengo qué vender y si no saco pan dulce, cachitos o dulces, con qué le pago a mis empleados”.

Aseguró que si el Gobierno nacional se compromete a despachar la material prima en relación a lo que exigen vender, “con todo gusto hacemos pan y vendemos todo el Necesitan vender dulces y cachitos para poder pagar al personal

tengo que vender y si no saco pan dulce, cachitos o dulces, codía”.BN/lb/Foto: Gabriel Ordóñez