Con tan solo 23 años, es una emprendedora dispuesta a triunfar

Dicen que para cumplir sueños solo hay que mantener la mirada fija en la meta, sin descanso y con mucha perseverancia. Esto es lo que hace a diario Hecmily Velásquez, una joven de 23 años que desde 2014 decidió emprender su propio camino como diseñadora y dueña de la marca Moonshine Tejidos, convirtiéndose de esta manera en un ejemplo a seguir y una valiosa de nuestra ciudad.

Desde muy chiquita, exactamente desde los 8 años, se vio involucrada en el mundo de los tejidos gracias a los aprendizajes que obtuvo de la mano de su abuela Aura y su mamá Luisa. “Mi abuela me impulsó muchísimo a crear piezas como diademas y gorritos, luego mi mami me fue perfeccionando y enseñándome varios puntos”.

Sin embargo, fue a los 15 años cuando se quiso meter un poquito más en el negocio vendiendo gorros, mochilas, carteras, morrales, bufandas y cuellos.

Posterior a esto, en 2014 se percató de que este mundo le apasionaba mucho más allá, y decidió probar un poco con la moda.

En ese año nació su bebé y fue cuando decidió arrancar con una marca como tal, con el nombre de Moonshine Tejidos, que significa luz de luna. “Le coloqué ese nombre porque mi bebé se llama Nahiara y en árabe ese es su significado”.

“A principios de 2016 me decidí a poner orden e iniciar los trámites para formalizar mi marca. Esto era lo que quería hacer y me dije que para qué darle tanta larga. De hecho, por la fluidez que ha tenido, eventos, ferias, manejo de redes y otras cosas, tengo a dos personas trabajando conmigo, mi mami y Sandra”.

A partir de ese momento, los días de Hecmily transcurren entre hilos, agujas, crochet e innovaciones. “Con la marca, me especialicé más que todo haciendo trajes de baño y crop top. Gracias a la enorme aceptación que tuvimos, decidí sacar la colección ‘Tejidos Mágicos’, que abarcó todo lo que venía elaborando”.

Agregó que ahorita se encuentra con la nueva colección llamada “Ovillos Géminis”. “Como su nombre lo indica, mostraremos las dos caras, la parte playera y la elegante en una sola colección para tener mayor variedad, satisfacer todos los gustos y ocasiones. Estamos combinando telas con tejidos”.

Al indagar un poco en qué fue lo que la inspiró a seguir surgiendo, mencionó que fue el amor que le tomó al crochet: “No es algo que lo vea como un trabajo, simplemente es una inspiración que me llena de paz, me daba tanta tranquilidad que sentía que era mi yoga, podría durar 12 horas tejiendo y yo feliz de la vida”.

Tejiendo sueños

Para ella, los estudios nunca están de más. Manifestó que le falta poco para culminar la carrera de Ingeniería Civil. “No tiene nada que ver con lo que hago, pero es importante que más allá de crear una marca, nos formemos”.

Relató que en diciembre del año pasado, tuvo la oportunidad de participar por primera vez en un desfile con la academia Concept Models Management, experiencia que para ella fue inolvidable.

Por otro lado, informó que el sábado 1º de julio volverá a mostrar los diseños de su nueva colección en pasarela, en un desfile llamado Tomorrow Experience, que se realizará en el Hotel Venetur a las 9:30 pm. “Quienes quieran estar presentes en el VIP o general, pueden conseguir la información en la página. Ahí se presentarán diferentes marcas venezolanas, es un impulso al talento de nuevos emprendedores”.

Afirmó que en este mundo no está bien copiar solo diseños de internet. “La idea es innovar constantemente, crear piezas nuevas que les gusten a tus clientes, por ejemplo, esta idea de agregar telas a los tejidos es para que las personas lo puedan usar en el día a día y que el ganchillo se apodere de una manera positiva, se trata de crear piezas para cada ocasión”.

Hecmily es de esas jóvenes que siguen apostando por el país, demostrando que sí se puede salir adelante. “Uno de mis planes es montar una tienda. Es muy importante demostrar que acá hay muchas oportunidades, el venezolano puede y tiene el poder de realizar cualquier actividad que se proponga y que sea realmente positiva”.

Asimismo, reveló que en el mundo del crochet hay cualquier cantidad de personas que lo realiza, especialmente en nuestra ciudad. “Espero que exista una competencia sana”.

Rompiendo barreras

“Deberíamos reunirnos para aportar ideas porque he tenido la oportunidad de impartir crochet en otros países y he notado que hacen clubs ganchilleros, y es algo que tengo planteado para aplicarlo acá en los Altos Mirandinos”.

Precisó que a mediados de este mes tienen pensado realizar un taller ganchillero en la Aldea Café. Aunque apenas lo está promocionando, si logra tener al menos ocho participantes, tendrá una fecha segura. Por las redes sociales estará publicando la información necesaria.

En tan poco tiempo esta marca ha logrado traspasar fronteras internacionales, como República Dominicana, Panamá, Argentina, Chile, Colombia, España, Aruba y próximamente Alemania.

Confesó que esto es una felicidad que no tiene cómo describir. “Lo ideal es que en cada rincón del mundo nos reconozcan por la calidad y comodidad”.

De igual forma, puntualizó que prueba cada pieza según el hilo que utilice, con la intención de comprobar la calidad que ofrece, además que trabajan con hilo crochet, algodón, lana antialérgica y lana bebé.

“Pretendo seguir con Moonshine, mi consejo sería llamar a cada venezolano a emprender e innovar día a día con lo que realmente quiere, todos tenemos la oportunidad y el éxito ahí, y vale la pena, siempre con la mejor actitud. Podemos mantener la calma y sacarse ese chip de la situación país”.

Por último, quiso hacerle la invitación a todos para que sigan las redes sociales de su marca, en Facebook se consigue como Moonshine y en Instagram como @Moonshine.tejidos. Se despidió, no sin antes reiterar su agradecimiento a todas las personas que la apoyaron y la siguen respaldando en todos sus proyectos./RR/ac/Foto: Gabriel Ordóñez/