Periodismo de Soluciones

Jornadas de ayuda social tomaron impulso en Carrizal

Fravalim

Publicidad

Por:
Por:

Periodistas de Avance

Comparte esta noticia

Maiker Castro

Fundación Fravalim extendió su mano a 700 familias

 

La panadería y pastelería Fravalim ubicada en la entrada de la Yerbabuena en el municipio Carrizal, fue fundada hace seis años. Según cuenta la dueña del establecimiento, Valentina Nieves, en un principio vendían solo galletas tipo pasta seca al mayor, pero la situación país los llevó hacía otro rumbo y comenzaron a despachar pan salado.

 

Explicó que, “por las condiciones de vida de las personas comenzamos a realizar censos para buscar cuales eran las necesidades de las comunidades y sus vecinos, visitamos casa por casa, fue un trabajo duro pero hecho con amor, cariño y pasión, así la directiva de la empresa tomó la decisión de crear la fundación Fravalim”.

 

Detalló que el proyecto nació con la iniciativa de estimular, ayudar e impulsar la parte social, cultural y deportiva para rescatar los valores, “es mejor dar que recibir, si los seres humanos damos un granito de arena a la sociedad, estaremos apostando por un mejor país”.

 

En su primera donación atendieron al liceo Manuel María Villalobos de la localidad y beneficiaron a 1.000 estudiantes y 30 docentes con sus productos. Posteriormente visitarían la casa de los abuelos durante la época decembrina para obsequiarles pan de jamón dulces y galletas.

 

Desde sus inicios han recorrido los sectores de Brisas de Oriente, Yerba Buena, Barola, Los Hidalgos y Las Aguaditas, “hemos ayudado a más de 700 familias, quiero resaltar que por un pan que un niño coma al día, puede evitar sufrir de anemia”.

 

Aseguró que hoy día van directo a otras problemáticas y asisten a quienes se encuentran en condiciones de extrema pobreza. Dos de sus propios empleados se adentran en las colectividades para detectar personas con discapacidad, desnutrición o abandonadas y hacer que su repercuta de forma más inmediata, “hacemos un chequeo de las zonas y vamos a las comunidades cuatro veces al mes”.

 

Con relación al por qué extender la mano al prójimo en un momento tan complicado, enfatizó en que no piensan en el factor económico a la hora de brindar una donación, “lo que hacemos es un gesto de amor, vemos como vienen a nuestra panadería niños a pedir ayuda y eso te rompe el corazón. No es solo regalar pan, sino dar un momento de felicidad”. /gf

 

 

 

 

 

 

 

Noticias relacionadas