Tribunal de Los Teques se declaró incompetente en este caso

RONALD PEÑARANDA

El Tribunal Quinto de Control de Los Teques otorgó libertad plena y sin restricciones a Elio Jesús Amundaray Villalta, un conductor de la línea Río Cristal, que fue acusado de matar a una perrita cuando transitaba en su unidad por la urbanización El Solar de la Quinta.

El pasado martes 26 de septiembre a eso de las 2:40 pm, a través del VEN-911, recibieron una llamada telefónica alertando que el hombre había arrollado a la mascota conocida con el nombre de Blanca y luego se dio a la fuga.

Un grupo de vecinos intentó auxiliar al animalito, luego lo llevaron a un centro veterinario ubicado cerca de la plaza Guaicaipuro, donde le hicieron el respectivo chequeo.

Blanca presentó hemorragia y traumatismos severos en las cuatro patas y ante los graves fracturas se vieron obligados a practicar la eutanasia, así consta en el informe elaborado por la médico veterinario María Ocariz, quien atendió el caso, documento a la cual tuvo acceso Avance.

Paralelo a esto fue activada una comisión de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) que momentos después dio con el paradero del chofer a quien se llevaron detenido.

Un proteccionista de animales interrogado por la PNB, quien se movilizó al sitio cuando ocurrió el suceso, manifestó que al llegar estaba la perrita tirada en el pavimento llena de sangre

Manifestó que de acuerdo a testigos el conductor se bajó del bus, estuvo escasos minutos dijo que ya volvía y no regresó más.

Los argumentos

El juzgado se declaró incompetente para conocer sobre las presentes actuaciones en virtud de que el fiscal del Ministerio Público atribuyó a Amundaray la presunta comisión del delito del maltrato animal, que amerita su trámite por un procedimiento especial establecido en el Código Orgánico Procesal Penal, por cuanto su competencia es de un tribunal en funciones de juicio.

Cabe destacar que el profesional del volante duró tres días preso. Por este hecho el jueves 28 los transportistas protagonizaron un paro que se prolongó por seis horas. Los compañeros del hoy exprocesado calificaron de arbitraria, exagerada y desproporcionada su aprehensión.