24 familias están siendo afectadas por socavamiento en Las Petrocasas de Mal Paso

En zozobra viven las familias de Las Petrocasas, ubicadas en el sector de Mal Paso en Los Teques; las crecidas del río San Pedro, los continuos deslizamientos de tierra y el derrumbe de un muro de contención han sido algunos de los factores que han aquejado a sus residentes por años. 

“Este año tuvimos la caída de un muro que se había construido incompleto, no soportó la fuerza de la lluvia y cayó, nosotros hemos limpiado esa zona y queda totalmente expuesto el estado en el que está”. 

Así lo dio a conocer Rosy Paravabith, principal afectada de los derrumbes y deslizamientos de tierra, quien destacó que las calles principales han comenzado a deteriorarse de manera progresiva, con la abertura de grietas que constantemente los vecinos deben reparar. 

“Todo el lugar está en riesgo, son 24 viviendas. Ante el socavamiento las calles se están hundiendo, es una consecuencia grave con la que hemos tenido que lidiar y que de alguna manera u otra buscamos de evitar”, manifestó. 

Durante las temporadas de lluvia, los vecinos deben colocar grandes cantidades de tierra para rellenar y evitar que el río llegue nuevamente hasta sus hogares, situación que ocurrió hace más de dos años. 

Estas casas comenzaron a ser construidas en el año 2010, fueron entregadas en 2012 por el Gobierno nacional, los afectados aseguran que desde 2015 se han visto afectados por la corriente del río.

Suplican por apoyo 

“Los Bomberos y Protección Civil nos han ayudado hasta donde pueden, que es haciendo ellos sus reportes, pero ya necesitamos al ente gubernamental porque esto es algo de envergadura. Lo último que nos dijeron y fue Inframir, es que no tenían los recursos para llevar a cabo el trabajo”, explicó. 

La problemática ha traído consigo afectaciones a nivel personal en los vecinos, quienes piden soluciones para no perder sus casas. 

“No sabemos qué es lo que esperan, que salgamos bajo la lluvia con nuestros hijos en lugar de prevenir antes. Ya he vivido esto, ya lo he pasado y sé lo terrible que es vivir en un refugio, pase casi siete años en uno y no es calidad de vida para nadie”, expresó Paravabith. 

Actualmente esperan la respuesta de todos los entes que tienen competencia en el área, soluciones que les permitan quedarse en las viviendas sin el temor de algún derrumbe o accidente.

“Nosotros no hemos dejado de movilizarnos con cartas y reportes, esta semana pensamos ir a la Gobernación y reactivar el caso de manera anual, pero queremos recibir respuestas”, aseveró. /at