Antiguamente en la calle Miquilén y El Cabotaje, había muchos comercios dedicados al ramo de mueblería, equipos electrodomésticos entre otros, ante el panorama económico desalentador y bajas ventas, muchos cerraron o cambiaron de rubro.
Un comerciante, manifestó: “hasta hace unos cincos años vendíamos colchones, muebles, ventiladores, closet y electrodomésticos, las bajas ventas y el alto costo para la adquisición de mercancía nos obligó a cambiar de ramo y abrimos una feria campesina, muchos colegas si cerraron y se fueron del país, lo que produce menos inversión y pocas fuentes de empleos”.
Agregó que en El Cabotaje había entre cinco y seis negocios de estos, ya solo quedan dos, “seguimos apostando por quedarnos en el país para trabajar, pero las cosas se nos hace muy difícil porque es poca la afluencia de clientes, ya que solo compran alimentos y por ejemplo un colchón ya no es un producto de primera necesidad”.
Aseveró que lamentablemente el país se encuentra dolarizado, por ende también tuvieron que hacer lo mismo con los productos en venta, “la gente solo viene a preguntar precios y se escandalizan, pero semanalmente podíamos vender entre ocho y nueve colchones semanalmente y ahora si acaso uno solo”.
“Esperemos que para la época navideña las cosas mejoren y podamos levantar las ventas, tenemos buenas expectativas, trataremos en lo posible de tener buenos precios para el público”/IM/rp
Fotógrafo: Kelvin Izquierdo