15/07/ 15.- Tan valioso es Salvador Pérez a la defensiva, que algún observador espontáneo de su ya tremendo aporte en el diamante pudiera olvidar que paso a paso se convierte en uno de los receptores más poderosos de la Liga Americana.
Pérez, que abrió como receptor de la Liga Americana en el Juego de Estrellas por segunda ocasión seguida, llegó al Clásico de Mediados de Temporada con 15 jonrones, a sólo dos de su marca personal en las Grandes Ligas, logrado en 2014.
Previamente, su máximo total de cuadrangulares en una temporada fue de 11 en 2012 y 13 en 2013. Entre todos los receptores de las Grandes Ligas en 2015, Salvador es el que más bambinazos ha conectado.
“La razón es el trabajo duro día a día”, analizó el venezolano. “El instructor de bateo de los Reales (Dale Sveum) me ha ayudado bastante. Uno viene aprendiendo mientras van pasando los años”.
Poseedor de un cañón por brazo, una habilidad singular para bloquear el plato y una capacidad para dirigir a sus lanzadores muy poco común en un receptor de apenas 25 años de edad, Pérez es uno de los peloteros que aprecia más su presencia en el Juego de Estrellas.
“Me siento súper contento de estar aquí”, indicó Pérez, quien disputó su tercer Juego de Estrellas Juego de Estrellas de la Americana.rpara su traspaso. . “Le agradezco a Dios por esta oportunidad que me brinda de estar con mi familia y a todos los aficionados”.
El concepto de familia utilizado por Pérez cobra un significado especial por la amplia representación de Kansas City en Cincinnati, entre ellos su paisano Alcides Escobar, quien fue el campocorto titular de la Americana.
“Que estemos tantos de los Reales aquí (seis) significa que las cosas han salido mejor este año”, analizó el valenciano. “Todos nuestros muchachos hicieron un buen trabajo. Estoy bien contento por todos ellos”.
