Al párroco del pueblo, Antonio Requena, lo raptaron y le robaron su carro Momentos de angustia vivió Antonio Isidoro Requena Piñate (81), párroco de San Pedro de los Altos, cuando este lunes un hampón se lo llevó como rehén, para luego liberarlo cerca de Rómulo Gallegos. Trascendió que como a las 7:30 pm de ese día, el padre se bajó de su Chevrolet Aveo, placas AC551FV, y cuando iba a ingresar a la iglesia fue interceptado por un sujeto, quien bajo amenaza de muerte lo introdujo en el carro, le inmovilizó las manos con tirro, lo mantuvo en el asiento posterior y le repetía “quédate tranquilo”.
Se presume que el delincuente iba acompañado por otro compinche quien escoltaba el automóvil en una moto. Supuestamente, la ruta que siguieron los secuestradores fue La Fosforera, hacia el sector Colinas del Ángel. El religioso fue liberado en un sector boscoso y rescatado a eso de las 8:15 pm sano y salvo en las cercanías de La Gran Parada. Solo presentó escoriaciones en las muñecas.
El vehículo fue hallado el mismo día en la calle Revolución, parte alta de La Matica, por funcionarios de la Policía de Miranda, gracias a que posee sistema satelital. Se intentó contactar al padre Requena, pero se encontraba efectuando la denuncia en el Cicpc y haciendo las diligencias ante el Ministerio Público para la devolución de su carro.
Se conoció que al párroco le han practicado dos operaciones de corazón y es conocido y apreciado en la zona por su apoyo a los más necesitados. Una feligresa señala que “los choros la tienen agarrada con la iglesia, pues se han metido varias veces a robar y en la última ocasión, como no encontraron nada de valor, se llevaron los micrófonos”.
Polimiranda lo rescató en tiempo récord
El comisario Oswaldo Villegas, jefe del Centro de Coordinación Nº 1 de la Policía de Miranda, informa que sus funcionarios estuvieron a cargo del operativo, que culminó con la liberación de Requena en menos de una hora. Explica que se trató de un robo y no un secuestro, ya que no llamaron a sus familiares para pedir rescate. Asegura que los delincuentes “no son del sector”, y que el malhechor que le quitó el carro llegó a la iglesia en una moto.
Hasta tres atracos al día
Con gran hermetismo para evitar ser víctima de represalias por parte de los hampones, una vecina advierte que los delincuentes sí son del pueblo, y algunos viven en las invasiones, que se han incrementado en la zona. Afirma que a diario se producen hasta tres atracos. “Para que la gente les entregue sus pertenencias rápido le dan cachazos en la cabeza”. Relata que hace 15 días una mujer estaba en la plaza a la 1:30 pm y un malandro le robó la cartera. “Como ella forcejeó, el tipo la golpeó y la arrastró por los cabellos, ante la mirada atónita de todos los presentes”.
Otro habitante manifiesta que las zonas rojas son El Cumbito, El Placer, El Calvario, Andrés Bello, Jesús María Ramos, San Rafael, y sobre todo El Cerro los Muertos, donde están enconchados todos los criminales; mientras que los secuestros son más habituales en Pozo de Rosas, El Placer y la vía que conduce a La Culebra. Karina Rodríguez, quien reside en La Culebra, subraya que “hay muchos drogadictos en la comunidad, hace falta que la policía suba y patrulle porque no podemos seguir así”.
Transportistas pagan vacuna
Los conductores de las líneas de taxis que se encuentran en el casco central de San Pedro, al parecer han sido víctimas de extorsiones y cobro de vacunas, para evitar que les roben las unidades o recuperarlas después de hurtadas. Un chofer dice que el rescate va desde Bs. 20.000 a 50.000, dependiendo del modelo del carro, por eso algunas cooperativas trabajan hasta temprano o evitan ir a ciertas zonas para no ser víctimas del hampa./ Adriana Flores Alcubilla.-ac/Foto: Jesús Tovar