Luz, agua y aseo brillan por su ausencia
A los habitantes del sector Silka, al lado de San Camilo, les cayeron las siete plagas, pues sufren con el agua, la luz, el aseo urbano; además del hampa que azota a la comunidad.
“La policía hace su trabajo, pero a medias, ya que cuando buscan a los delincuentes en la vía principal de Alberto Ravell, estos nos exigen que abramos las puertas para ellos esconderse”, reveló Carmen Rivera.
También manifestó que han secuestrado a varias familias y les roban todo lo que consiguen a su paso, incluso se llevan carros y motos para pedir rescate. “Sentimos pavor ante este problema”.
Viven en penumbras
La habitante sostuvo que todas las bombillas de la zona están dañadas, algunas prenden intermitentemente hasta cierta hora, pero llega un momento en que todas se apagan y el sector queda como boca de lobo.
Además, como no cortan la maleza, los amigos de lo ajeno la utilizan como escondite. “Hemos pedido la ayuda de Corpoelec y la respuesta es siempre la misma: no hay presupuesto”.
Tuberías podridas
El servicio de agua también es pésimo, ya que de acuerdo con Rivera, las tuberías tienen 60 años, por lo que están en muy mal estado, y difícilmente reciben el vital líquido.
Contó que son los mismos vecinos los que deben cargar con las responsabilidades de los servicios y hacer las reparaciones. “Todos los tubos están colapsados, ya no sirven, necesitamos una sustitución urgente, pedimos a Hidrocapital que haga acto de presencia y nos ayude”.
Finalmente, puntualizó que aún no reciben las bolsas del CLAP. “Estamos pasando hambre, somos 22 familias afectadas con todos estos inconvenientes, hemos pedido a la Alcaldía la colaboración y mejora en todos los servicios, pero nunca recibimos respuestas, es un derecho que estamos exigiendo”. KB/ac/Foto: Víctor Useche