Siguen aumentando las pérdidas en el sector comercial

ILDER MAESTRE

Comercios a lo largo y ancho de los Altos Mirandinos sufren pérdidas incalculables producto de los tres apagones ocurridos en los últimos cuatro días.

La mayoría de ventas de alimentos reportan mercancía podrida por no contar con la refrigeración necesaria.

Una frutería de avenida Independencia, optó por rematar plátanos y cambures en las afueras de su negocio, ya que estos estaban a punto de perderse y prefirieron venderlas al público a un precio por debajo de lo estipulado.

Otro negocio, cerca de residencias El Savil, también se vio en la necesidad de poner en oferta varios cortes de carnes que estuvieron a punto de dañarse, lo que generó largas colas.

En el Mercado Municipal propietarios de carnicerías, pescaderías y queseras tomaron sus previsiones y adquirieron bolsas de hielos para proteger la mercancía.

Un carnicero dijo: “cuando empezó el apagón prologado de más de 12 horas, tomamos precaución y compramos bastante bolsas de hielo para proteger los mostradores, sin embargo las cavas se mantenían un poco frías pero igual es mejor prevenir que lamentar”.

Roberto Lima, indicó que “los quesos se mantuvieron en buen estado, pero si pasa mucho tiempo y no se vende esto tienden a dañarse si no tienen refrigeración, espero que se restablezca rápido el servicio para evitar eso”.

Con respecto a los puntos de ventas, en varios establecimientos indicaron que no había línea y aceptaban transferencia o efectivo, en otros trabajan bajo la modalidad del Pago Móvil.

En el mercadito de la avenida Francisco de Miranda, según su regidor Rigoberto Barroeta, todo transcurrió con normalidad este domingo.

Más de un centenar de puestos abrieron. Habían puntos de ventas trabajando con energía alternativa.

“Los puntos que funcionan con generador de corriente son alimentados por medio de los carros, y esos asociados que tienen esa alternativa prestan apoyo a otros puestos”.

En las instalaciones no se presentó la concurrencia de otros días Los pocos compradores llevaban unos cinco artículos.

“Vine a comprar unos hortalizas para hacer unos granos y a ver precios, ya que no me alcanza mucho la plata. Dispuse de unos 20 mil soberanos para llevarme algo para la casa” indicó Ana robles.

Compras nerviosas

También se evidenciaron decenas de personas realizando largas filas en diferentes puntos de la ciudad en panaderías, supermercados, ventas de víveres y el Mercado Municipal, para adquirir huevos, harina precocida, plátanos, pastas, queso, jamón y pan.

Del apagón del sábado la luz regresó a las 10:00 am de este domingo y a partir de ese  momento se reactivó la conexión de los puntos, lo que motivó a un gentío a salir de sus casas para comprar comida para estar prevenido ante futuros corte de luz.

Entre los rubros más buscados están las velas. El paquetico lo venden en Bs. 4 mil.

Ventas dolarizados

Supermercados, bodegones, panaderías, entre otros, recibían dólares como forma de pago.

El costo de una bolsa de hielo en algunas licorerías se cotiza en cinco dólares.

“Tenía unos dolaritos guardado en el bolsillo y tuve que sacarlos para comprar pan y otras cosas que necesito en casa”, dijo Carmen Hernández.

Otra señora, dijo que una platica en “verdes” que la mandó su hija de Ecuador la usó para comprar café, azúcar, pan y demás productos básicos.

Indignación y desesperanza

Carlos Jiménez, manifestó: “¿Cómo es posible que un país petrolero sufra la caída de la luz. ¿cómo se explica eso?. Tuve que recorrer casi todo Los Teques para conseguir un sitio donde aceptaran tarjetas de débito para poder comprar comida, además tengo una hora en cola para poder entrar, es muy grave la situación por la que estamos pasando”.

Ramón Tovar, quien esperaba a las afuera de una panadería, expresó: “la corrupción y falta de mantenimiento nos ha llevado a este caos eléctrico, los reales para invertir en las plantas eléctricas la desaparecieron. No tenía nada de comida y tuve que salir este domingo (antes del tercer apagón) que funcionaron los puntos para poder comprar algo. Hay mucha gente desesperada con toda esta situación”.

Mónica Echenique, subrayó:  “Vivimos en un país atrasado, los ciudadanos pedimos respuesta ante tanta inoperancia, en mi casa se pudrieron unos granos, carne,  pollo. Los tuvimos que botar a la basura. Eso no es justo, la comida está muy cara y los reales no alcanzan, cada día estamos peor”.

Rosa Echeverría, indicó: “La situación es alarmante, ya tenemos varias días sin luz y nada que arreglan esas fallas. Tenemos que tomar avena y comida cocida que teníamos guardada, pero ya otros alimentos se nos dañaron. Vine a comprar aunque sea tres o cuatro cositas para llevar la casa, la situación del venezolano es muy desesperanzadora”./ Fotografia: Jesus Tovar